Así que aquí estoy, o aquí he estado, moviéndome de un lado al otro. Sacudiendo las mantas, mi cabeza, pateando mis pies hacia un lado, me di la vuelta sobre mi espalda mientras miraba las sábanas sobre mí. Esta cama es increíble, no hay razón para que no pueda ponerme cómoda. Con un suspiro frustrado, mi cabeza se movió hacia arriba, colocando mi mirada en los números rojos brillantes.
"¿4:15 A.M? ¿Y ella todavía no está en la cama?" murmurando la pregunta para mí, quité las mantas. En silencio puse mis pies descalzos en el suelo, de puntillas a la barandilla. Los gruñidos reprimidos llenaron el loft tranquilo que alcanzaba mi curiosidad. Mis ojos bajaron a la sala de estar debajo y lo que vi hizo que mi mandíbula cayera al suelo.
¡Maldita mierda!
Cejas bien cuidadas, fruncidas en concentración, el cabello rubio pegado a la piel, los ojos apretados, los dientes blancos roídos en el labio inferior. Los abdominales brillaban de sudor cuando la camisa de Nirvana se levantó hasta debajo de su pecho, una pierna extendida sobre la parte superior del sofá y la otra firmemente extendida. Mis ojos se pegaron a la forma en que Piper trabajaba su clítoris con movimientos circulares con su mano derecha mientras metía 2 dedos de su mano izquierda dentro y fuera de su entrada. Esto estaba mal, no debería tener que preocuparse por esconderse para masturbarse en su propio lugar, mientras tanto todavía estoy parada, dura y distraídamente empujando mi mano debajo de mis boxers.
Sus piernas comenzaron a temblar mientras empujaba sus dedos con fuerza y luego, en medio de su estado frenético, se detuvo.
Espera, ¿ella se corrió?
Mi piel se erizó y sé que estoy atrapada. Nuestros ojos se encontraron, los de ella nublados por la excitación, los míos esperan pacientemente el próximo movimiento. Una sonrisa ladeada era todo lo que necesitaba para bajar corriendo las escaleras, ansiosa por ayudar a terminar la tarea. Pude haber estado nerviosa en términos de tamaño con sus parejas anteriores, pero hacer que las mujeres se corran es un problema que nunca tuve.
Un potente aroma me golpeó y estaba casi en trance cuando me senté en el sofá. Piper deslizó sus dedos entre los pliegues carmesí mientras me acomodaba. Me hizo preguntarme cuánto tiempo ha estado aquí abajo masturbándose.
"Acércate." ella susurró y me arrastré de rodillas agachándome para ver su brillante e hinchado clítoris. "Mira ..." sus palabras se fueron apagando cuando sus dedos reanudaron sus círculos ásperos y su pesado bombeo. Gemí por su olor que me abofeteó, el líquido se precipitó sobre los dos dedos en su interior y ella jadeó. Mi mano temblorosa salió disparada, amasando su muslo desnudo con un solo pensamiento en mente:
Probarla.
Arrastré las yemas de mis dedos hacia el interior de su pierna, luego enganché mi brazo debajo de su rodilla y la apoyé en mi hombro. Entendiendo la pista, Piper dejó caer la pierna del borde del sofá y me permitió descansarla sobre mi hombro izquierdo. Sorprendida de que ella no peleara, me puse cómoda, eché un vistazo fugaz a los pesados orbes azules. Ella retrajo sus manos, deslizando sus dedos mojados sobre mis labios. Un rápido movimiento y mi lengua salió y joder, Piper sabía tan bien como olía, a fruta tropical con un toque de sal.
Quería adorar su cuerpo, pero el tiempo es esencial, ya que está demasiado irritada, con un suave gesto de confirmación, la parte plana de mi lengua presionada contra su clítoris acariciando el botón sensible.
Un jadeo llegó a mis oídos.
"Más." su voz se quebró al final. Cumpliendo, chupé la dura protuberancia, raspé los dientes suavemente y recibí un ruido sordo de su pecho mientras sus manos volaban hacia mi cabello. Metí mi lengua entre sus pliegues, la dejé caer a su entrada mientras empujaba dentro de ella. "Mierda, bebé". ella jadeó y me encontré derritiéndome por la mala palabra y porque es la primera vez que me llama bebé.
