Syd the babysiter [supongo que pink Floyd xd]

1

— ¿Cómo?

— Exactamente —se levantó de golpe de la mesa—. ¡Voy a cuidar niños! No debe ser tan difícil, ¿no es así?

— Bueno...

— Digamos que sí son como tú, lo es —dijo Rosemary mirando su celular.

— ¡Rosemary!

— Se me salió, perdón —dijo restándole importancia con un gesto en la mano.

La mujer suspiró.

— Roger...

— Es Syd —dijo rápidamente.

— Lo mismo —suspiró nuevamente—. Es una responsabilidad muy grande.

— Meh, ni tanto —se encogió de hombros—. Solo es mantenerlos con comida y evitar que destrocen la casa.

— Definitivamente quiero grabar eso y subirlo a Instagram —dijo Rosemary entre risas, Syd la miró mal.

— No subirás nada de tu hermano a internet —sentenció su madre en tono serio, Rosemary lanzó un leve bufido—. Y en cuanto a ti, no creo que sea buena idea.

— Oh... vamos mamá, por favor —pidió—. Quiero ganar dinero.

— ¿No puedes hacerlo de otra forma? No lo sé, limpiar autos, repartir el periódico...

— Nop, quiero cuidar niños —dijo.

— No vas a cuidar niños, Roger —dijo la madre.

— Syd —volvió a corregir—. Y sí puedo. Escucha, si cuido a Rose por un día ¿me dejarías?

— ¡Solo soy menor que tú por un año! —exclamó la chica.

— Lo mismo —se encogió de hombros.

— Dejándome en ese punto, no confío en tu hermana —dijo la madre de ambos.

— ¡Oye!

— ¿Entonces...? Por favor —pidió, ella negó—. Por fa —volvió a negar—. Por fi.

— No, Roger, no cuidarás niños y punto.

— Por favor.

— No.

— Por favorcito.

— No.

— Por f-

— ¡Ya déjalo que lo haga para que deje de molestar! —interrumpió Rosemary, a su madre no le quedó otra que asentir con cansancio.

— ¡Sí! —exclamó Syd contento—. ¡Voy a cuidar niños!

— ¡No tan rápido, velocista! —exclamó su madre.

— Mamá, ese meme saldrá en dos años más, esto se desarrolla en el 2017 —dijo Rosemary.

— Oh, cierto, lamento esa controversia atemporal —dijo la madre rompiendo la cuarta pared para luego añadir—. En fin, primero creo que deberías intentar con un Niño cercano, como tu primo, Kenny.

— NO —dijeron ambos a la vez—. NO.

— ¿Qué tiene de malo Kenny?

— MAMÁ, ES SATÁN REENCARNADO —exclamó Syd.

— Es como si un Gremlyn y un demonio hubiesen tenido un hijo —coincidió Rosemary estremeciéndose.

— Por dios, no es para tanto —dijo—. Sí, es un poco malcriado, pero...

— ¿Recuerdas cuando comenzó a hacer un berrinche en el cumpleaños de Alan solo porque la tía Anne le quitó su celular? —preguntó Rosemary.

— Sí, pero todos los niños pequeños...

— ¿Y recuerdas cuando se le cayó su helado en el zoológico y comenzó a llorar mucho mientras trepaba por las paredes y giraba la cabeza? —preguntó Syd.

— ¡El vómito era real! —concordó Rosemary.

— Por dios, los doctores dijeron que esa vez habían estado vendiendo helados con drogas en el zoológico —dijo su madre.

— ¡Pero sí hizo un berrinche! —reclamó Syd.

— Escucha, si quieres ser niñero, tendrás que pasar a tu primo primero —dijo la madre—. Solo tiene seis años, ¿Qué podría pasar?