Maalik [SeChan]

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— Entonces, Maalik asesina a 10 hombres en menos de 12 horas, muertes que ni siquiera otros asesinos se han atrevido a a practicar.

Park ChanYeol se encontraba enfrente de todos exponiendo los siguientes eventos.

—Caballeros, Maalik nos está llevando a la Edad Media, donde la Santa  Inquisición gobernaba.

SeHun o Maalik, como él se hace llamar. Torturaba a sus víctimas tal y como lo hacia la Santa Inquisición, además de torturarlos dejaba un oso de peluche con los cuerpos. Un oso de peluche.

Al final de la mesa, Xiumin levantó la mano.

—¿Qué relación hay entre las víctimas con los peluches? ¡No tiene lógica!

Eso era lo que rondaba en la cabeza de Park todas las noches.

—Esperamos encontrar esa respuesta pronto.— Yifan respondió.

Y así termino la junta.

Al día siguiente

Un asesino reía mientras observaba un enorme cuadro que se hallaba colgado en su habitación.

SeHun estaba por decirle algo a «ese» cuadro, pero antes de que saliera una palabra de sus labios...
Un par de brazos medianamente largos lo abrazaba por atrás, sin siquiera darse la vuelta SeHun sabía quién era.

—Lo siento mucho, Hunnie... Si tan sólo hubiera estado aquí...— El cuerpo de LuHan temblaba ligeramente.

—Estarías muerto. — SeHun se soltó bruscamente.

SeHun creía que no cambiaria nada. En lugar de llorar, él reía. Reía por él, por Yixing, su amore; porque muy en el fondo él sabía que Yixing estaría muy enojado si tan sólo suelta una lágrima.

La pintura era —es— hermosa. Hecha con amor. Hecha con pintura de buena calidad.

Hecha con Yixing...

... Su sangre.

—Es hermoso.— SeHun con orgullo seguía pasando sus ojos por el cuadro.

—Papá... — LuHan lloraba mientras observaba el cuadro. La obra maestra era nada más y nada menos que Zhang Yixing. El mencionado se encontraba flotando en lo que parecía una piscina, su cuerpo hacia contraste con los colores fríos del atardecer, rojo, amarillo y anaranjado.
<En multimedia está lo que sería la pintura>

SeHun tenía dos debilidades:

1-Yixing
2-LuHan con lágrimas

Torpemente SeHun abrazo a LuHan.

—Papá está en el infierno conquistando con su presencia, no llores. Ambos odiamos verte llorar, así que regálame una sonrisa tan grande como el sol.

Y así lo hizo.

Ambos sonrieron a la pintura como si Yixing estuviera ahí, frente a ellos.

Yixing, tu suicidio altruista no será en vano.