Capitulo 2: Problemas

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Noah estaba tirado en el sofá de la habitación cuando Maurice llego. Aún recordaba con claridad cuando se había encontrado con aquel vampiro desafiante, que estaba con un grupo de otros seres sobrenaturales, entre ellos la idiota de Kalid, a quien no soportaba.

Le divirtió la transformación del rostro del niño bonito, que al parecer se llamaba Maurice, cuando se percató de quien era él. Su rostro se había puesto tenso y pudo ver el disgusto dibujado en él.

-…- Parecía que Maurice quería decirle algo, pero en ese momento prefirió guardar silencio, mejor callarse que perder su tiempo discutiendo con un humano.

- ¿Alguien además de usted está viviendo aquí?-.

-Bueno, el otro chico se llama Sebástian aunque no lo conozco bien- Dijo Noah mientras se incorporaba del sofá, secándose el cabello mojado con una toalla que llevaba en los hombros- Puedes quedarte con la cama de arriba, sé que a los de tu raza les gusta dormir en lugares altos-.

Maurice lo ignoro, pudo localizar una cama común y una litera en la habitación. Se dirigió a esta y con sus dedos palpo la distancia que había de un escalón al otro, subió a la cama de arriba y se acostó dándole la espalda a Noah.

-Eres un vampiro muy educado ¿Eres un noble o un real? La mayoría de los que hay aquí son nobles, pero ninguno es tan formal y refinado como tú-. Preguntó Noah con la toalla en la cabeza, observando a Maurice con sus brillantes ojos claros y una ligera sonrisa picaresca en su rostro, sabía que no le caía bien y eso lo divertía.

-Eso es algo que no te incumbe-. Dijo secamente Maurice sin moverse, tratando de dormirse para alejarse de esa pesadilla.

- Había una vampiresa a tu lado, vi que la tratabas de una manera muy formal y correcta, me hacías recordar a los sirvientes de los vampiros reales, ellos suelen tratar muy bien a sus amos-.

Maurice se quedó helado, no podía permitir que Noah descubriera su relación con la señorita Rosalie, sino tendría que ser expulsado. No sabía cómo reaccionar, podía sentir que Noah estaba esperando su respuesta impaciente, golpeando con el pie el suelo de manera repetitiva.

-Ella es mi prima, mi padre y su padre son hermanos. Necesito descansar, mañana es mi primer día de clases-. Maurice se quitó los zapatos y los arrojo desde lo alto al suelo, no le importaba donde diablos cayeran, se tapó con las sabanas hasta la cabeza y se acurruco contra la pared. La idea de ser primos fue lo único que se ocurrió en ese momento.

Noah comprendió que el niño bonito hoy no tenía ganas de jugar con él, seguramente mañana estaría de mejor humor. Arrojo la toalla al suelo y se desplomo en la cama que estaba debajo de la de Maurice. Observaba las vigas de madera que sostenían a la segunda cama y el colchón mullido, tenía ganas de provocarlo empujando con sus manos el colchón para que se moviera.

Pero Noah estaba muy cansado, sabía que si lo seguía molestando probablemente Maurice se enojaría y lo atacaría. Además aun no sabía con qué tipo de vampiro estaba tratando, probablemente sea un vampiro real como aquella chica del vestido azul, así que decidió dejarlo tranquilo por el momento, nunca se sabe que esperar de un vampiro real.

Suspiro y cerró los ojos para tratar de conciliar el sueño, sus músculos le dolían pero ya estaba acostumbrado a quedarse sumamente exhausto después de cada entrenamiento, cada vez el cansancio iba aminorando, pero justo ese día se había tenido que enfrentar a un grupo de alborotadores liderados por Trevor, el desgraciado licántropo había escapado antes de que pudiera hacer algo, la próxima vez seguramente podría capturarlo. Y esta vez no se lo perdonaría.

-Despierta Rosalie-. Dijo una voz suave y serena.

-Buenos días Maurice-. Rosalie estiro los brazos hacía atrás tratando de desperezarse y dando un gran bostezo.

Decesso [CANCELADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora