Capítulo 1 - De vuelta al apocalipsis

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Laura le dijo algo al oído a Miguel que cambió, por un momento, el rumbo de la historia.

-Ven, siéntate. Necesito decirte algo. -Dijo ella, un poco alegre-.

-Dime. -Contestó él, mientras se sentaba en la cama-.

-Últimamente me he sentido mal, siento que hay algo que está fallando en mí. No estoy bien, pero trato de verle el lado bueno a las cosas... -Suspiró-. Estoy agotada, pero en medio de todo esto logro encontrar la felicidad. ¿Cómo te quedas si te digo que estoy embarazada?

Se hizo un silencio de impacto en el cuarto.
La miró a los ojos, creyendo que ella reiría en señal de que era una broma, pero no fue así.

-Pues, ¿Cómo quieres que reaccione? -Sonrió él, de forma nerviosa-. Estaría muy feliz, y más de enseñarle al bebé a sobrevivir en un mundo así. Es...

-Espera, para ahí. No digas nada más, fue suficiente, con esto sólo quería reafirmar que eres el chico con el que quiero pasar el resto del apocalipsis. Y no, no estoy embarazada.

La miró, le sonrió, y se le tiró encima.

-Sabes que te amo, ¿Verdad? -Le dijo, mirándola tiernamente a los ojos-

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-Sabes que te amo, ¿Verdad? -Le dijo, mirándola tiernamente a los ojos-. 

-Lo sé, todos los días me lo demuestras, y eso me encanta no sabes cuánto. -Sonrió con picaría, mordiéndose los labios tiernamente-.

Se miraron de nuevo, perdiéndose en sus miradas, y se besaron lentamente. Ni él, ni ella, se cansaban de que sus labios se juntaran cada dos por tres a lo largo del día. Miguel se quitó de encima, y se dejó caer sobre las sábanas. Laura guardó silencio, y al final los dos reposaron.

Sonó la puerta. Una, dos, y tres veces. Laura y Miguel dormían.

-¡Miguel!, ¡Miguel! -Gritó alguien desde afuera, una voz femenina pero no reconocible.

El chico se despertó asustado, con el cabello desarreglado, y con aliento a recién levantado. A olor de muerto.
Despertó entonces a Laura.

-No pueden ver a alguien ni un segundo tranquilo en medio del apocalipsis. -Exclamó la chica, quien al igual que Miguel, se encontraba con el cabello desarreglado-.

Los dos salieron de la habitación. Era Riley.

-Oye, te necesitamos, o bueno, Daniel mandó por ti, dijo que necesitaba hablar de algo importante. -Dijo Riley-. Ah, sí, los dos, vengan. -Corrigió al ver a Laura-.

Salieron entonces de la habitación, un poco apurados, expectantes de lo que iba a pasar.

-¿Tienes idea de qué pueda ser? -Le preguntó Miguel a Riley-.

-Sinceramente no. Tan sólo llegamos hace un par de horas, y ya parece que quieren algo de nosotros. Lo cual no está mal, sólo... -Dijo Riley, interrumpida por Laura-.

The Infection II: En busca de un finalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora