Fantasía (KakaIru)

Fantasía

   Nunca había notado los pequeños detalles en la pared del techo de su habitación, sí que le hacía falta una mano de pintura, también debería hacer algo con esa mancha de humedad cerca de la puerta ¿Cuánto tiempo llevaba ese techo así? No lo sabía. Y es que nunca se había fijado, tal vez un tiempo si, cuando 'él' aún no estaba, pero cuando comenzaron a salir y posterior a convivir, su mirada a partir de aquel momento hasta este día solo estaba sobre ese hombre a su lado, incluso cuando le tocaba ir abajo solo tenía ojos para esas expresiones. Y desde entonces esta era la primera vez que se iban a la cama disgustados, y no es porque no pelearan, no, siempre lo hacían y, casi siempre era culpa de Iruka...culpa de Iruka que se enojaba por algo que él hacía.

En el momento que comenzaron su relación acordaron escucharse, siempre respetarse, jamás traicionarse, y nunca nunca irse a la cama enojados. Cada vez que pelearan se darían un momento a solas, después hablarían, solucionarían el problema y por qué no, harían las paces con sexo. Bueno, eso solo lo había pensado Kakashi, pero hasta el momento sí pasaba, por eso mismo buscaba molestar a Iruka algunas veces para tener sexo garantizado.

Pero ahí estaba, o mejor dicho, ahí estaban, ya acostados después de haber reñido, él mirando su mugriento techo e Iruka junto a él dándole la espalda. Sin haber hablado y por supuesto sin sexo ¡sin sexo!

¿Qué podía hacer? Iruka apenas llegando de la maldita fiesta de cumpleaños de la tetona Hokage se metió a la cama ignorándolo completamente. Ya ni siquiera recordaba por qué habían discutido...bueno...si recordaba...apenas. Pero él no tenía la culpa de que esa mujer pelirroja que estaban saludando, le guiñara el ojo y le lanzara un beso como si nada, Iruka se había marchado furioso y cuando quiso seguirlo la mujer aprovechó para acercársele y plantarle un beso en su cuello.

¿Qué puedo hacer? Volvió a preguntarse suspirando. Y de repente una idea se le cruzó por la cabeza, una pervertida idea.

Se acercó a Iruka, quien fingía dormir a su derecha, apoyó su cabeza muy cerca de la suya, sus labios casi rozaban el cuello del moreno.

— Te veías muy sexy con esa ropa, Iru-chan ― le dijo intentando provocarlo.

― Ah ¿sí? ¡Pues la quemaré! ― le respondió con enojo. Sí, dejó bien en claro que fingía dormir y cómo no hacerlo, había estado escuchando los suspiros que daba Kakashi pensando que estaba arrepentido y que iba a disculparse. Pero le salía con esto. Encima se le pegaba.

Streak uno, Kakashi. Muy bien, a lanzar la bola otra vez.

― ¿Y qué piensas de mí? ¿Te gustó mi traje entallado?

― Parecías pingüino.

Auch. Streak 2. Uno más y estas fuera Kakashi. ¡No! No lo iba a permitir. Iban a tener sexo de reconciliación como que se llama Kakashi "papasito" Hatake.

― ¿Quieres saber lo que se me cruzaba por la cabeza cuando te miraba?

― No.

― Te lo voy a decir igual ―le mencionó acercándose más a él, porque ese "no" no contaba como un streak 3, no señor, por lo que continuó ― Quería arrancarla ― le dijo en un suave y sexy susurro que estremeció al moreno. Ahora voy con todo, pensaba excitantemente emocionado Kakashi.

― Te arrastraría a un cuarto. Ahí dentro te tomaría de la cintura, acercaría mi mano a tu pantalón, tocaría un poco tu entrepierna solo para saber lo mucho que me deseas y sí que me deseas, mi amor ― la oreja de Iruka cosquilleaba demasiado debido a los susurros ― Tomo tu cierre. Comienzo a bajarlo despacio. Puedo ver como tu pene palpita ―volvió a susurrar. Kakashi notaba como la piel de su amante se erizaba. Y para desgracia de Iruka su entrepierna comenzaba a reaccionar a la fantasía del ex Anbu.