DONDE NACEN LOS CEREZOS

ENTRENAMIENTO PT. 2

HE VUELTO!
Trago profundo intentado aliviar la resequedad que sentía en su garganta. El sudor comenzaba a emanar detrás de su cuero cabelludo al sentir la mirada fría de aquella joven de piel obscura que esperaba aún con el brazo extendido sosteniendo aquella enorme vara.

No muy seguro de lo que le depararía en el futuro la sujetó con fuerza, sabía que no tendría oportunidad frente a ella pues le ganaba en experiencia y a simple vista en fuerza.

- Nichole te dará algo de ventaja - pronunció Butters - Quédate tranquilo -

- Este primer combate será de prueba - dijo ella - Quiero analizar tus movimientos para partir de ahí y comenzar a entrenar de acuerdo a tu resistencia - explicó - Vas a intentar golpearme y yo me cubriré -

La chica se colocó en una posición de defensa, sosteniendo la enorme vara con ambos brazos en forma diagonal.
Por otro lado Tweek intentaba sujetarla a pesar de su nerviosismo que se proyectaba en el temblor de las palmas de ambas manos.

- ¿Estás listo? - le preguntó Butters a lo que a Tweek respondió asintiendo con la cabeza - Inicien - ordenó dándoles la señal

La mirada de Nichole se intensificó, estaba concentrada en cada movimiento que el rubio daba. Tweek miraba su entorno buscando la manera de atacarla pero sin lastimarla, no quería herirla o peor, terminar herido él.
Dirigió su ataque al centro, directamente hacia su pecho. Con algo de rapidez y sin pensarlo mucho intentó golpearla, cosa que resultó en un fallo pues ella lo esquivó con gran facilidad.

- ¿Es todo lo que tienes? - le insulto con la esperanza de sembrar en él alguna especie de ambición o por lo menos incentivar sus ganas para tener un combate de verdad.

Tweek se mantuvo callado y sereno, no tenía ganas de estar ahí, de pelear. Únicamente quería pasar tiempo con su amigo de la infancia y conocer lo que había sido de su vida a lo largo de todos esos años que vivió con su ausencia.
La última opción que le quedaba era pelear, debía ganarse el respeto y la confianza de aquel grupo de ninjas, debía hacerlo.

- ¿No dirás nada? - interrogó ella en tono burlesco - Bien, entonces es mi turno - amenazó

Nichole comenzó a girar la vara de manera experta, sus movimientos eran elegantes, sutiles y coordinados. Sabía lo que hacía y eso asustaba a Tweek, el golpe fue rápido y certero y sin darse cuenta el rubio terminó cayendo al suelo y con un dolor agudo en el labio, acercó su mano y después la retiró observando un líquido rojo en la yema de sus dedos.

- Arriba - exigió la chica al verlo completamente desorientado - Aún no terminamos -

Aquellas palabras asustaron al rubio cuyos músculos se tensaron volviéndose duros mientras que sus pies se plantaron fuertemente en el suelo.
Nichole avanzó rápidamente hacia él, una patada en el pecho del rubio lo empujó hacia atrás, repentinamente cayó de rodillas al suelo pues sintió como el aire abandonaba su cuerpo y este a su vez era remplazado por un intenso dolor; Nichole lo había golpeado directamente en el estómago.

- Es mejor que empieces a tomarte en serio - le advirtió - No pienso detenerme, no te contengas -

- Vamos Tweek - susurró Butters al verlo en el suelo intentando aliviar su dolor - Necesito que hagas un esfuerzo -

Cerca de ahí el grupo de ninjas observaba aquel doloroso espectáculo. Ginza mantenía sus puños apretados tan fuerte que sus palmas habían adquirido una coloración rojiza, estaba molesto.

- Esto ya no es divertido - dijo Clyde con una expresión de preocupación - Nichole debe controlarse o si no terminará por matarlo -

- ¡T-Tok- T- Token has a- al- algo! - exigió Jimmy