Tsukishima estaba tranquilo escuchando su música
Hace ya dos meses se hizo pareja del rey de la cancha, no sabe como pero ese idiota del voleibol le robo el corazón
Se sentía bien con él, además le encantaba molestar a hinata. No pensó que estar con él rey seria tan agradable, tomarse de las manos, ver las reacciones del rey era muy hermoso para él
— ¡Kageyama coloca para mí! — otra vez ahí estaba hinata diciéndole a su novio que colocará para él
—Esta bien — él rey accedió
—Espera — apareció él rubio
—¡Tsukishima! — hinata gruño, sabia que ese rubio no dejaría que practicaron juntos —Dejanos
—Ahí van otra vez — hablo suga viéndolos desde el otro lado de la cancha
—Kageyama practicara conmigo
—¡No! —hinata agarro a kageyama
—No toques a mí novio — se enojo —Es mí novio así que él debe de estar conmigo
Otra vez, él rubio solo lo hacia por fastidiar al enano
—Tsukishima déjanos — hablo kageyama
—Jaja — se burlo hinata
—¡Y tú no te rías! — le grito kageyama a hinata
—Rey — kageyama suspiro, tsukishima trataría algo otra vez, solo para salirse con la suya —¿Me estas dejando de lado? — preguntó con fingido enojo
—No otra vez tsukishima
—Prefieres a ese enano antes que a mi, yo tu novio — hablo irritando a kageyama
—Tsukishima no te saldrás con la tuya esta vez — hablo kageyama —Vamos hinata
—Rey estas seguro, no te hablare
Kageyama lo ignoro, y eso puso feliz a hinata
—Jaja pobre tsukishima — él rubio se enojo — Si nós dejas entrenar te daré algo
—¿Que me puedes dar tú de valioso? — pregunto sin interés
— Espera — tsukishima solo lo miro mientras corría por algo
—¡Hinata apúrate o ya no colocare para ti !— le grito él azabache
—¡Espérame! — corrió hacia él rubio y le mostró un sobre
—¿Qué? — pregunto él rubio
—Huh mira — del sobre saco unas fotos
Tsukishima abrió sus ojos en sorpresa, no creía lo veía. Hinata le mostraba fotos del rey cuando era más pequeño
—¿De donde sacaste esto? — pregunto mientras miraba las fotos
—Por ahí — respondió
—¡¡Hinata!! — le grito molesto el rey
—Si las quieres deja que kageyama y yo entrenemos, si no. Dámelas
Tsukishima agarro las fotos y se dio media vuelta para ir a sentarse
—Solo por esta vez — hablo
—¡Tengo más fotos! — le grito hinata
—¡¿Qué?! — él rubio lo miro molesto —Dámelas
—Si las quieres deja que kageyama y yo entrenemos por mucho tiempo
Lo pensó y le iba a responder cuando
—¡¡Ahg!! — kageyama le lanzo un pelotazo al enano naranja ese
—¡¡Apúrate!!— estaba muy molesto de esperar tanto
—¡Maldito kageyama! — le grito hinata
De regreso a casa, tsukishima y kageyama iban solos yamaguchi y hinata se habían ido antes
—¿Por qué estás feliz? — le pregunto kageyama a su pareja
—¿Eh?
—Responde
—Él rey me quiere mandar
—Responde maldito
Se trataban con amor, pero también como de costumbre
—Me hieres rey — fingió estar triste
—Responde tsukishima, hinata te dio algo ¿verdad?
—Si me das un beso te lo diré
—No
—Entonces quédate con tus dudas
—Habla
—No mí rey
—Tsukishima
—¿Dime?
—¿Que te dio hinata?
—Nada
—¿Como que nada? Vi que te entrego algo ¿que era?
—No era nada
—Tch — masculló molesto él azabache
—Jajaja no te enojes — abrazo al azabache
—No me toques — le hablo kageyama
—Rey
—¿Qué?
—Te amo
Kageyama miro a otro lado, para que él rubio no viera su sonrojo pero este ya lo había visto
—¿Porqué te escondes?
—Dejame
—Rey
—¿Qué Quieres?
—Dame un beso
—No
—Siempre soy él que empieza el beso, tú nunca me besas por tu cuenta
—No lo are
—Vamos rey solo uno
—Púdrete
Suspiro —Eras muy lindo cuando eras pequeño
—¿Ha?
—Rey, quiero ver fotos tuyas de cuando eras un niño
—No.... No tengo
—Mientes
—No... No tengo
—Rey ven
Kageyama siguió al rubio a un lugar oscuro en donde no había nada