Lo veía en todas partes, no habia nada que no le recordara su mirada. Sólo una vez se miraron a los ojos y fue cuando sucedió la magia, el mundo se consumió y dio origen al amor, pero ninguno de los dos lo sabia, ni se atreverían a admitir.
Sucedió brutalmente, en ese momento, no hubo conexión más poderosa, se perdieron entre el brillo y la esperanza de sus miradas ingenuas.
Pero... nada es para siempre y ellos no eran la excepción.
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Lo que no puedo decirte
RandomDesvaríos de una adolescente. Cada capítulo es un texto diferente que no tiene nada que ver con el anterior. Si le das una oportunidad te lo agradezco, estoy haciendo esto con mucho cariño y espero que te llegue a gustar. La anterior portada esta h...