Capitulo uno; No ahí verdad dentro de la mentira.

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En el universo; DreamTale, a lo lejos de los dominios de los sueños y felicidad, muy apartado de la civilización, a los destierros de ese pequeño pueblo pacifico, se podía contemplar un lúgubre castillo.
Nadie en su sano juicio se atrevida a explorar es tierra prohibida, ni siquiera el mas valiente y gallardo de los aldeanos.
No obstante,  cada lunes por la mañana, Dream; el guardián de los sentimientos positivo, se adentraba ese hostil castillo.
Ningún aldeano entendía el porque, o simplemente no se animaban a cuestionar la decisión de ese esqueleto.
Pero los lunes era el peor día para todos, ya que, a la lejanía se escuchaban los gritos y sollozo del pequeño soñador. Temían por el bien de su guardia. ¿Pero que podrían hacer? Nightmare, era mas fuerte que todos ellos, lo único que si podían hacer, era llorar, rezar e implorara que ese día llegara a su fin.

Pero lo que no sabían los aldeano era, el detrás de la verdad…
En el castillo de Nightmare, Killer preparaba tres tazas de te, una ves que los tenia listo, llevo esas bebidas junto con algo dulce y salado, asía el comedor. Una vez ahí deposito las tres tazas en la pequeña mesa del centro.
Sollozo y quejas se escuchaban las cuales se iban acercando cada vez mas, al levantar al mirada, observo desde el otro pasillo dos hermanos caminar rumbo hacia el.
Nightmare, no estaba en su forma corrupta, penas tenia una camisa, se había quitado su chaqueta. Dream, por otra parte, estaba llorando, parecía adolorido, los pómulos rojos y los ojos hinchados de tanto llorar.

--¡Deja de llorara, de una vez!

--¡Pero fuiste muy bruto! –grito entre llorosos-- ¿Cómo me voy a sentar ahora?

Killer, al escucha eso miro por inercia a su líder. Su cara tenia una expresión de; ¿Enserio?

--No… no me mires así…-- se puso mas que nervioso, era obvio que Killer malinterpreto aquellos quejos de su hermano—Dream se movía tanto que callo de trasero y se linzo el coxi.

-- Ya… claro… --murmuro el de lagrimas negras.—Dream, te prepare te de manzanilla. Espero que te tranquilices con esto.

-- Gracias, Killer… --se sentó, tomo su te y se calmo un poco.

--¿Tanto teatro por un dolor de espala?—cuestiono el príncipe de las pesadillas, tomando otra de las tazas. –Gracias por preparar el te, Killer. Esta delicioso.

-- Recuérdame. ¿Cuánto dura tu estado actual? –pregunto Killer, dándole un sorbo a su te.

-- Ya te eh dicho que 24 horas, todos los lunes. –respondió de mala ganas, aun no podía creer que entre todos sus súbditos, tubo que ser Killer quien se enterara de su secreto.

--Asi que Dream. ¿Por qué vienes los lunes?

--Bueno… --tenia vergüenza de admitirlo.

--El idiota es de dormir mal. –intervino Nightmare.—Al dormir mal, sufre de dolores de espalada, solo yo puedo quitarle, con masajes. Pero es tan marica que llora al mínimo rose que le haga.

--Mi hermano hace muy buenos masajes. Dura toda la semana, pero entrando domingo me duele, por eso debo de venir los lunes.

--Ahora veo por que nos daba día libre los lunes. –murmuro Killer.

--Por cierto hermano, ¿Por qué no me dijiste que Killer es tu pareja?

Tras esa pregunta inocente, Nightmare y Killer escupieron sus bebidas calientes. Se miraron mutuamente, miraron a Dream por inercia y gritaron a la par…

--¡No somos nada!

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