Entre nuestros labios
existe cierto magnetismo,
pero están condenados como el sol y la luna
a acercarse sin jamás encontrarse.
Ya estoy esperándote,
hijastra del anochecer,
en el fin de la avenida
hasta el nacimiento del amanecer.
Te necesito más que nunca
para vaciar mis bolsillos
pero llenar mi alma con leves quejidos
y caricias compradas para jamás ser mías.
Te necesito para saciar mi soledad
con ese licor mortal
que dentro de poco me hará
volver a ti una vez más.
Hijastra del anochecer
de infértil desnudez,
debo calmar mi sed
en tus botones color nuez
En tus aguas lodosas,
en tu desierto gélido,
en ese jardín de rosas
regadas entre amores no correspondidos.
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Hijo De Saturno
PuisiColección de veinte poemas en los que expreso mis sueños más recurrentes, mis sentimientos intensos, mis creaciones imaginarias y mis fantasías mezcladas con una pizca de realidad. Cada poesía relata una historia, pero juntas mantienen una relación.
