Somos Culpables© [#1]

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No estoy preparada. Aún no. Simplemente no puedo abandonar la ciudad. No puedo abandonar a mi madre en estos momentos,no con la carga emocional que llevamos. Sin embargo no hay vuelta atrás, insistió en seguir con mi vida, en abandonarla a ella.

Aprieto fuertemente el volante antes de decidir terminar de bajar del auto, convenciéndome de no dar marcha atrás y regresar. Reviso mi celular y tengo una llamada perdida de mamá. Decido marcarle mientras tomo mis maletas y subo al tercer piso en donde esta mi habitación asignada. Al tercer ring contesta.

-¿Estas bien? ¿Ya llegaste? ¿Es todo tranquilo?

-Mamá, tranquila todo esta bien. - trato de calmar sus nervios. - el viaje fue largo pero finalmente voy en el pasillo camino a la habitación. ¿Como estas tú?

-Bien, tu abuela estará aquí unos días en lo que me acostumbro a estar sola, prepararemos el postre favorito de tu padre. ¿Recuerdas cuando lo preparábamos juntas? - su voz se escucho entre cortada, se que está a punto de llorar. Me detengo frente a la puerta pero decido no entrar aún.

-Claro que lo recuerdo, terminábamos muy sucias y yo iba toda llena de harina hasta la oficina de papá a entregárselo. - al viajar a esos recuerdos se me hace un nudo en la garganta. - ¿Quieres que regrese? Puedo volver a entrar en la antigua universidad, no quiero dejarte. No creo que esto sea buena idea.

-Si haces eso no me lo perdonaría, ya hablamos de esto y te quedaras allá, conseguiste tu beca y tendrás mejores estudios que acá en este pueblo. Además perderás más tiempo.

- Ya lo se... Al igual sabes que estaré muy pendiente de ti. Deberías decirle a la abuela que se quede a vivir contigo.

- Si, hablare con ella. Ten mucho cuidado cariño, veras que todo estará bien.

-Esta bien, te amo.

Nos despedimos y cuelgo el teléfono. Tomo la llave y entro a la habitación que es bastante bonita a lo que esperaba. Hay dos camas, una de ellas, tiene pegados varios póster de bandas y algunas decoraciones en la pared pero no hay nadie más en la habitación. Hay dos pequeños escritorios y un gran espejo que sin duda es mi parte favorita de la habitación junto al baño que agradezco que no sea compartido con todos los chicos de la universidad.

Lo único que tengo claro es que en esta universidad, las habitaciones se comparten con chicos o chicas. En mi caso comparto habitación con un chico.

Dejo mis maletas encima de mi cama y me dispongo a guardar y arreglar mis cosas. Por el momento no tengo con que decorar mi pared entonces solo cuelgo un cuadro con una foto familiar que tengo
Doy un beso a mis dedos y lo pego a la cara de papá. Voy al baño y decido tomar una ducha, el agua esta sorprendentemente fría teniendo en cuenta el clima de la ciudad, pero es refrescante.

Al salir de la ducha me visto nuevamente y seco un poco mi cabello con la toalla.

De pronto escucho la puerta de la habitación abrirse y una voz masculina inunda mis oídos. Salgo del baño y me encuentro con un chico alto, muy alto.

- Hola. - le extiendo la mano y la recibe.

-Gad, Un gusto. - sonrío al escuchar aquel nombre tan peculiar.