Somos Culpables© [#1]

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El chico entra y capta la atención de todos en la habitación.

Se abre un lugar entre dos chicas. La que tiene los senos afuera y la que anteriormente estaba sentada a su lado. La ultima le soba un poco la espalda y pone una mano muy cerca de su parte intima. El se remueve un poco en su lugar y con disimulo quita la mano de la chica.

En cuanto la interrupción termina, la morena que nos estaba contando con lujo y detalles su experiencia sexual con un ciego continua y aunque trate de no imaginarme todo lo que contó fue imposible. Genial, ahora saldré con un leve trauma de acá.

Después de la anécdota de la chica que quedo encantada con el ciego, el juego sigue su curso. A este punto de la noche, sólo cuestiono el por que decidí venir a esta fiesta si lo único que he hecho es escuchar y ver como juegan verdad o reto.

La morena le pregunta a Eva, la soba espaldas. Se nota por la mirada le da a la castaña que no se llevan muy bien.

Okey, un nuevo avance. Por fin me aprendí el nombre de alguien, Eva.

- Querida Evy. ¿Verdad o reto? - la hipocresía en su voz me hace sonreír un poco. Que voz tan aguda y molesta.

- Verdad.

- Bueno, creo que para nadie es un secreto que eres una cualquiera, - algunos ríen ante tal comentario - pero ¿Quien es el afortunado que te hace cerrar las piernas por amor? - la mala intención es sus palabras es notable. Eva la mira confundida, luego sonríe y toma un shot quitándole el gusto a la morena quien la mira peor.

- Es mi turno. - habla Eva. - Aedus. ¿Verdad o reto?

- Reto. - responde el chico de ojos oscuros.

- Te reto a... - la chica lo piensa un poco y cuando parece que el bombillo mental se le encendió, vuelve a mirar a Aedus. - ...que estés lo que queda del juego en calzoncillos. - él la mira un poco mal pero no protesta, solo obedece.

Se levanta, se quita la camisa y luego el pantalón. Es delgado pero su cuerpo es tonificado y fuerte. Sus brazos y espalda definida me hacen querer enterrarle las uñas de placer. Un momento ¿Que diablos estoy pensando?

Sacudo un poco mi cabeza para alejar aquellos pensamientos de mi cabeza. Aedus parece darse cuenta y me sonríe un poco con arrogancia. Él vuelve a sentarse donde estaba.

- Es mi turno. - me mira directamente a los ojos y esa mirada escalofriante ya no está. - Chica nueva ¿Verdad o reto? - es la primera vez que los escucho decir una oración completa y percibo un raro acento extranjero muy sutil.

- Blair, no "Chica nueva" - respondo de manera un poco hostil aunque no era mi intención. - Reto.

- Esta bien chica nueva, ahora se que te llamas Blair. Por cierto lindo nombre. - su sonrisa burlona deja ver su limpia dentadura.

Estúpido.

- Te reto a que... - parece meditar un poco su propuesta, pero se que no lo hace. - ...bailes para todos los presentes. - dice con aires de superioridad. De verdad que en este lugar son mas imbéciles de lo que pensé.

Me siento un poco insultada.
Acaso ¿Tengo cara de zorra?

Me quedo un momento pensando en como salir de esta situación mientras todos me miran expectantes. Luego de unos segundos sonrió por la idea que se me acaba de ocurrir.

Gateo hasta el chico de ojos oscuros que tengo al frente. Me levanto dejando mis piernas a la vista de todos, por un momento me siento como una gigante frente a todas estas personas sentadas en el suelo que me rodean. Aedus solo me sigue con su mirada. Cuando el piensa que voy a empezar a mover mis caderas frente a su cara me agacho nuevamente quedando a su altura. Nuestros ojos se encuentran directamente y tiene esa estúpida sonrisa arrogante que espero borrar en unos momentos. Me aprovecho de la situación y digo muy cerca de su cara.