One Last Chance [H.S.Mature]

Capitulo 6

Había pasado ya un mes y Maxine estaba ya con casi tres meses de gestación, su vientre había crecido aunque no considerablemente como lo habían hecho sus antojos a media noche.

Se bajó de la cama con cuidado de no pisar ninguno de los cinco gatitos bebes en su habitación que aún no tenían nombre y salió de la habitación caminando de puntillas.

Solo iría por un poco de helado y luego volvería a la cama, no quería interrumpir el sueño de nadie pero no contaba con que Harry tenía un sueño liviano y cualquier movimiento en casa lo hacía despertar de inmediato.

Siempre estaba atento a lo que sucedía a su alrededor debido a su trabajo, había hecho algunos enemigos en los años que llevaba al mando como coronel.

Max doblo dirigiéndose hacia la cocina y pegó un brinco cuando una mano pesada se posó sobre su hombro volteando a ver enseguida de quién se trataba con la respiración completamente agitada.

- ¿Dónde vas? -Harry frunció el ceño bajando la mirada a la pelirroja frente a él escaneandola.- Descalza y con ropa de cama de verano.

- Dios Harry, me asustaste.- Maxine sostuvo su pecho intentando recuperar algo de calma, no entendía como alguien tan grande podía ser así de sigiloso.- Voy por algo de helado.

- ¿Helado? Es invierno aún Max, si comes helado te vas a enfermar, más si andas con esas pintas.

- Quería comer pancakes con helado, pero es muy tarde.- Se encogió de hombros haciendo un puchero.- Además, desde hace unos días cada vez que me meto a la cama siento como si estuviera hirviendo.

- ¿Las hormonas?

- No lo se.

- Bien, te haré algunos pancakes y luego a la cama ¿Si? -Harry suspiro acompañándola hasta la cocina.

Había sentido unos suaves pasos y estaba aliviado de que fuera ella, no se imaginaba a alguien tan estúpido como para entrar a robar en la casa de un militar así que podía ser cualquier otra persona con malas intenciones.

Entro a la cocina y rodó los ojos recordando que había enviado a tapizar todas las sillas nuevamente debido a que algunas tenían arañazos de gatos y no quería más batallas con Clare debido a ellos.

- No hay sillas.- Maxine frunció el ceño viendo a su alrededor.- ¿Que paso con ellas?

- Contraté a alguien que hiciera tapizados nuevos y vino por las sillas después que te fuiste a la cama.

- ¿Dónde nos vamos a sentar?

- De momento tú en la isla y yo voy a cocinar.- Harry la alzó de improviso sentandola sobre la mesa de la isla de la cocina haciendo que soltará un pequeño chillido por la sorpresa.

- Está frío.- Se quejó poniendo sus manos bajo su tracero para así no tocar directamente la fría superficie.

- Perdón.- Harry río al ver sus expresiones y comenzó a buscar los ingredientes por la cocina sonriendo.

Había hecho pancakes solo un par de veces en la vida pero no quería quedar mal con la pelirroja así que busco el libro de recetas con la mirada y suspiro aliviado cuando lo encontró.

- Si quieres puedo hacerlos yo.- Maxine sonrió conmovida por la intención del mayor en preparar lo que deseaba comer.- No hay problema.

- No te preocupes, lo haré yo.

- ¿Seguro?

- Seguro, no creo que sea tan difícil hacerlos, soy un hombre muy capaz y me encantan los retos nuevos.