One Last Chance [H.S.Mature]

Capitulo 14

Epílogo.
Un año después.

Max gimió encajando sus uñas en la espalda del ojiverde cuando esté embistió con fuerza provocando que acallara un grito debido al placer que estaban sintiendo en ese momento, estaba apunto de sonar la alarma que advertía al mayor que era momento de comenzar a prepararse para trabajar así que tenían que aprovechar cada segundo o minuto al máximo cuando lograban tener algo de intimidad, Hero era el mayor obstáculo que tenían y un balde de agua fría para bajar la calentura, siempre aparecía en los momentos más inoportunos cortando el rollo.

- ¿Escuchaste eso? - Max abrió los ojos deteniendo los besos de Harry con la palma de su mano.- Creo que es Hero.

- ¿Que? No.- Harry nego siguiendo con las embestidas que daba apretando sus dedos en la pequeña cintura de la pelirroja.- Te estás imaginando cosas.

- No, estoy segura que es Hero.- Max apoyo la palma de su mano sobre el pecho desnudo de Harry dándole un empujoncito para que saliera de encima.- Dame cinco minutos, si está despierto lo pondré en el corral y le encenderé la televisión.

Desde que Hero había comenzado a caminar desde el año y los tres meses salía de la habitación en las mañanas y comenzaba a deambular por la casa hasta que llegaba a la habitación matrimonial, así que busco con la mirada en el piso sus bragas y se las puso junto con un brasier y una camiseta de Harry para abrir la puerta y chequear al pequeño.

- Cinco minutos.- Harry suspiro cubriéndose la ingle con un cojín al ver a su hijo junto a su osito de peluche al otro lado de la puerta, lo amaba pero deseaba un poco más de tiempo para poder intimar con su esposa.

- No más de eso.- Max sonrió avergonzada y tomo en brazos a su hijo desapareciendo por el pasillo.

Aunque Harry nunca le reclamaba algo sabía lo incómodo que debía ser para él ese tipo de situaciones, ya que lo era para ella en gran cantidad así que para el debía ser mucho más, pero aún así no decía nada.

Camino hasta la sala poniendo a Hero dentro del corral para luego encender la televisión poniendo las caricaturas favoritas de él.

- Dame quince minutos con papi y seré tuya todo el día.- Max sonrió con ternura hacia su hijo besando su frente.- Pórtate bien y no salgas de aquí o te podrías lastimar con algo ¿Está bien? - Lo vio asentir y suspiro aliviada.- Te traeré un jugo de la nevera.

Salió disparada a paso rápido hacia la cocina abriendo la nevera y sacando un biberón con lo que recordaba era jugo de naranja natural del día anterior.

- Debes estar bueno.- Abrió la tapa y lo olió para luego darle un sorbo sin tocar la boquilla y sonrió cuando así era.- Perfecto.

Salió nuevamente hasta la sala dándole el biberón al pequeño ojiverde.

- Bebé despacio, cariño.- Advirtió un poco ansiosa con la sensación de que este quedará solo lejos de ella.

Hero estaba a cuatro meses de cumplir los dos años pero aún así era un bebé que necesitaba atención todo el tiempo y aunque podía comprender algunas órdenes simples  que le daba también era travieso como cualquier niño de su edad.

Con algo de pesar dió vuelta para ir a la habitación dejándolo solo, solo iban a ser unos minutos se consoló a si misma cuando entro a la habitación matrimonial viendo a su esposo de pie junto a la cama con la potente erección que la había despertado aquella mañana.

- Dijiste que iban a ser cinco minutos.

- Le di algo de jugo.-Max se excusó de inmediato cuando esté la tomo de la cintura para comenzar a besarla nuevamente con intensidad, primero su cuello y luego sus pechos apretando sus pezones entres sus labios procurando no lastimarla demasiado haciéndola gemir.