Capitulo 11

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Los siete meses de embarazo a Maxine se le habían pasado volando y sin ninguna eventualidad, más junto a la compañía de Harry que la cuidaba a cada momento, pero esa mañana en particular había comenzado a sentirse un tanto extraña.

Había ido al baño a orinar más veces de la que acostumbraba y ni siquiera había podido beber todo el vaso de leche que desayunaba todas las mañanas, estaba sudada sin siquiera hacer algo de esfuerzo y de vez en cuando sentía dolor en el vientre, un dolor opresor que luego se aliviaba, el bebé quien ambos habían decidido no conocer el sexo hasta el nacimiento parecía moverse demasiado y bruscamente.

Estaba un poco preocupada debido a que Harry no estaba en casa, esa misma mañana Clare, quién era la esposa de este hasta el momento lo había llamado para decirle que el divorcio estaba listo, que solo tenía que ir a firmarlo y ya no tendrían nada que ver con el otro, no creía necesario decir que el ojiverde había ido de inmediato a reunirse con ella.

Maxine se puso de pie cuando las ganas de orinar la invadieron de un momento a otro y soltó un grito cuando un dolor casi insoportable hize que volviera a sentarse nuevamente sintiendo un líquido recorrer sus piernas.

¿Había roto fuentes? No lo creía, tenía aún un mes y medio para hacerse la idea de ser madre según el doctor que la atendía, no se podía haber adelantado tanto, apenas tenía siete meses de gestación y una semana. Ahora no estaba preocupada, estaba aterrada.

Espero que el dolor cesará y vio la hora en su móvil, en las clases de parto le habían dicho a todos que era bueno tomar el tiempo a las contracciones, eso determinaría cuan preparada estaba para parir y si se trataba de una falsa alarma, aunque no lo creía, estaba segura que no se había orinado encima, así que realmente había todo fuente.

Tragó saliva deteniéndose a pensar por unos segundos, podía llamar a una ambulancia y que llamarán a Harry desde ahí o llamarlo directamente a él para que la llevara, estaba ocupado pero el decía que nada era más importante que ella y su bebé, así que sin pensarlo más le marco, agradecía tenerlo en marcado rápido, soltó un suspiro de alivio cuando esté contesto de inmediato.

El ambiente se sentía completamente denso en la oficina notarial dónde se habían reunido, los únicos que hablaban eran los abogados de ambos mientras que Harry y Clare ni siquiera  se daban una mínima mirada, los cuartos frente a un notario que legalizaria los acuerdos.

Había llegado el momento de firmar y Harry estaba ansioso por formalizar el divorcio, así que cuando había sido su turno lo hizo de inmediato siguiendo las indicaciones de quién lo asesoraba, pero no así Clare quién le había temblado la mano al hacerlo y miraba el simple papel que la desvinculaba por completo del hombre que amaba con los ojos llenos de lágrimas, unas que se había negado a dejar caer cuando firmó la última hoja.

Eso era todo, ahora legalmente era una mujer divorciada, tembló cuando vio al notario poner su timbre sobre las hojas y suspiro subiendo la mirada hacia el hombre frente a él, su ahora ex esposa que solo la miraba con lastima, una lastima que no merecía. Pero tenía razón, tarde o temprano algo así parecía, era la única que parecía estar enamorada en esa relación, no importaba que tan bien este fingiera, ella siempre se había caracterizado por ser una mujer inteligente y siempre lo había sabido.

- Supongo que eso es todo.- Harry intento sonreír pero solo le salió una mueca algo extraña para luego bajar la cabeza.- Lo siento mucho.

- ¿Que es lo que sientes? -Pregunto algo brusca.- ¿Divorciarte de mi o nunca amarme?

- Cualquier cosa que te haya hecho que te hubiera provocado algún daño, nunca fue me intensión.- Suspiro.- Clare, voy a estar siempre que lo necesites, para cualquier cosa, por todos los años juntos, así que si alguna vez necesitas algo, no dudes en buscarme.

One Last Chance [H.S.Mature]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora