Del Odia Al Amor Hay Un Paso // Todoroki Shoto (CANCELADA)

Capítulo 9: "Dolor de cabeza"

Narra Akane:

A los pocos días del incidente con los periodistas, a la hora de la materia de héroes, Aizawa-sensei entra en clase.

–Hoy se ha decidido que el entrenamiento de héroes se hará entre All Might, yo y otra persona –nos comunica.

Sero levanta la mano y el sensei le da la palabra.

–Pregunta, ¿que haremos?

–Un naufragio –contesta Aizawa sacando una tarjeta donde pone “rescue”–, entrenamiento de rescate.

Suspiré. Me dolía la cabeza y al oir aquello supe que me iba a doler más.

–De rescate... Suena complicado –dice Kaminari

–Si es un naufragio, es mi especialidad (croac, croac) –comenta Tsuyu-chan.

–Podéis elegir si os ponéis vuestros trajes de héroes. El sitio está algo lejos a si que iremos en autobús –dicho esto, el profesor se fue.

Elegí ponerme mi traje de heroína. Así era más fácil utilizar mi quirk.

–¡En filas de dos según el orden de clase! ¡Nos montamos ordenadamente! –ordenó Iida cuando llegó el autobús.

Me senté (o más bien, me tumbé) en la última fila de asientos. El dolor de cabeza era algo ya insoportable y me dolió más cuando todos empezaron a hablar y la bomba humana a amenazar a todos de muerte.

“Porque me habrá tocado una clase así”, suspiré resignada.

Al fin llegamos y dentro nos esperaba, nada más ni nada menos, el héroe espacial N° 13.

–Naufragios, corrimientos de tierra, incendios... –empezó el héroe–; aquí se reproducen desgracias y accidentes a montones. Es un parque de entrenamiento creado por mí: Ultrainstalación Similada Juntacatastrofes (U.S.J.).

Después de una larga charla que nos impartió n° 13 sobre los dones (de la que no me enteré de nada) el profesor Aizawa habló:

–En primer lugar... –pero un ruido le interrumpió.

Todos dirigimos nuestra vista a una pequeña plaza central de la que salían todos los caminos a los distintos accidentes.

Enfrente de la fuente, apareció un agujero de color morado por la que salió una mano y después una cabeza de una persona que se tapaba la cara con otra mano.

–¡Agrupaos y no os movais! –nos ordenó Aizawa– ¡N° 13, protege a los alumnos!

El extraño agujero morado se expandió y de él salieron más personas con...bueno, no tenían aspecto de venir a darnos una cálida bienvenida.

–¿Qué es eso? –preguntó Kirishima con intriga– ¿Es como en el examen de acceso? ¿Qué ya ha empezado?

–¡No os movais! –nos volvió a decir el profesor– ¡Son villanos reales!

Todos dieron un respingo. Todos menos yo. No sabía lo que estaba pasando. Hacia ya tiempo que se me había nublado el pensamiento y no me enteraba de nada. Empezaron a hablar (tampoco me enteré de lo que decían). Después de eso, el profesor Aizawa saltó a la plaza central y empezó a luchar contra esas personas.

Mientras tanto, n° 13 y los demás empezaron a correr, a si qué los seguí pero algo se puso entre nosotros y la puerta. Pensaba que nos íbamos ya, y me alegré, pues quería volver a casa, pero como se habían parado me acerqué al profesor para informarle de lo mal que me encontraba.

–Sensei, creo que voy a volver al autobús. Me lleva doliendo la cabeza toda la mañana y estoy un poco mareada.

Él me miró incrédulo. No esperé a que me contestara y seguí caminando hacia la puerta hasta que me topé con algo. Más bien alguien. Levanté la cabeza y me encontré con unos ojos amarillos.

–¿Y tú quién eres? –pregunte

–Niña insolente, serás la primera de la que me encargue...

–¿Pero qué...? –logre decir antes de que el mismo agujero morado y negro de antes, por donde habían salido las personas extrañas, me tragara y solo viera oscuridad.