Capítulo 1 | Es Un Abusó, No Un Trató.

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Yo sé que casí nadie lee estos avisos, y lo digo porque yo tampoco lo hago, jajajaja, lo único que quiero decir es que los países hablan en su idioma natal, y entre todos sé entienden por un traductor que llevan pegado a sus ropas, que se conectan con un cable a sus oídos, solo por que me da flojera traducir y escibir, así que todo estará en español.

Sin nada más que decir.

¡Comenzemos!
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México como siempre se despierta tarde para una junta con la ONU. Sale corriendo de casa para llegar a una hora un poco decente o por lo menos no tan tarde.

Cuando llega a la sala, se da cuenta de que no llegó una hora tarde... Sino una hora temprano, pues se le olvido ajustar su reloj al cambió de horario.

-Puta madre... Me asuste por nada... -Dijo el amante del chile muy molesto consigo mismo- No mames... Ni siquiera la ONU a llegado.

El mexicano no tuvo otra opción más que esperar a que los demás llegarán, lo único que pudo hacer fue sentarse en su sitió. Solo pasarón 10 mintutos cuando la primera persona (segunda en este casó) llegó a las instalaciones del lugar.

-¿México? ¿Llegas primero que yo? Siempre eres el último...

-En primer lugar: buenos días Tripaloski. En segundo lugar: Sí llegué temprano fué por que se me olvido el maldito cambió de horario y me desperté una hora antes, cuando creí qué ya iba una hora tarde a la junta...

El ruso solo se quedó callado y se dirigió a su asiento, esperando a los demás al igual que el mexicano.

-¿Y tú? ¿Por qué llegaste tan temprano Tripaloski? - México se estaba aburriendo, y como Rusia era el único que estaba con el, no le costaba intentar crear un tema de conversación, a decir verdad el mexicano solo hablaba con sus hermanos, y de vez en cuando con la gorda de USA y su hermano Canadá, no se quería meter con las potencias. Pero en verdad se estaba aburriendo.

-¿Uh? Yo siempre llegó a esta hora- el ruso solo estaba indiferente ante el mexicano, ya que él sabía lo problemático que podía ser México aveces, pues siempre o casí siempre lo veía pelear con Estados Unidos.

-¡No te creó ni tantito! Qué maldita flojera, yo nisiquiera alcance a desayunar por lo desesperado que estaba de llegar...

El ruso se sorprendió cuando escucho al mexicano decir que no había desayunado. >>Eso podría hacerle daño.<< Pensó.

Solo se levantó de su asiento en silenció, México se quedó sólo unos pocos minutos, pensó que había incómodado al ruso.

Cuando Rusia volvió le entregó un plato con un desayuno típico, unos huevos estrellados con tocino a un lado.

-¿Qué? ¿Qué es esto? -El mexicano estaba sorprendido, en verdad Rusia había gastado dinero para comprarle un desayuno.

-Es un desayuno para tí, no desayunar puede ser muy dañino.

-No, no puedo aceptarlo, es muy amable de tú parte, gracias, pero... No puedo dejar que gastes dinero por mí.

-El dinero no es un problema, por favor México, acéptalo solo esta vez.

El amante del chile no tuvo opción más que aceptar, mientras comía parecía un niño pequeño el cual estába saboreando su comida preferida echa por su madre. Cuando termino de comer, cada 5 segundos le daba las gracias al ruso, pues sentía que todos sus gracias no eran suficientes; Mientras que el ruso solo le decía que no se preocupará, que era solo de su cortesía.

-¡En cuanto pueda te pagaré el desayuno Tripaloski! ¡Lo juró!

-Por milésima vez México... ¡No es necesario!

Tu Formas Mi Sonrisa ||RusMex||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora