NOTA: En este One shot esta basado en una leyenda japonesa de la cual no me acuerdo el nombre y vamos a simular que ni Komaru ni los padres de Naegi exsisten para que se adapte mejor la historia.
Pedido por: Hikaru606
(Sorry si no quedó como esperabas ;-;)
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Ya era época de invierno y Naegi se encontraba en su casa la cual se encontraba cerca de un bosque, estaba pasándolo un poco mal puesto que había sido despedido de su "trabajo" de medio tiempo y para empeorar las cosas en esa época las cosas no andaba muy bien económicamente, hasta que de la nada unos extraños ruidos lo sacaron de sus pensamientos, haciendo que este saliera nervioso de su casa a investigar junto con una linterna y tras caminar un poco llegó a una bello y hermoso claro cubierto de nieve en el cual se encontraba una grulla herida chillando de dolor a causa de una flecha que había encajado en su ala izquierda haciendo que sus sangre tiñera la blanca nieve de un rojo carmesí, el chico se acercó de manera gentil agarro con cuidado el ala herida y removió la flecha de su ala y una vez ya libre el pájaro voló hacia el cielo fuera de la vista de Naegi, el cual ya se encontraba de regreso a su casa, una vez devuelta a su hogar escucho alguien llamar la puerta, así que fue a mirar quien era y cuando lo hizo se dio cuenta de que era una bella joven de su misma edad que traía puesto un vestido blanco de arandelas, una capucha del mismo color junto con unas botas de color marron claro.
disculpe señor me he perdido y me preguntaba si usted me podría dejar dormir aquí por favor - el chico al ver la situación en la que se encontraba la contraria se hizo a un lado y la invito a pasar.
No tengo mucho para ofrecerte tengo poca comida y solo te puedo ofrecer dormir en el sofá, si eso te parece bien entonces eres bienvenida- menciono con una dulce sonrisa el contrario para después hacer un ademan con la mano para que entrara.
Por mi esta bien señor, después de todo con su compañía me es suficiente- al terminar de decir eso la chica hizo una pequeña reverencia y entro a la casa generando un pequeño sonrojo en el contrario.
P-por favor llámame Naegi, es decir es muy raro que aún que tengamos la misma edad me digas señor - hablo algo más rápido por los nervios y el impacto que habían generado las palabras anteriores.
Oh ... pues si es así llámame (T/N)- sonrió de manera cálida la joven-
Paso el tiempo y (T/N) y Naegi se encariñaban mas el uno con el otro hasta el punto de que ambos se enamoraron, pero un día en la casa de Naegi la situación estaba empeorando al punto de que no tenían para comer.
Naegi-kun quedate aquí y pase lo que pase no mires tras la puerta hasta que yo salga- después de decir eso (T/N) señalo una habitación en la que había un hilar para tejer y entro a aquella habitación.
Pasaron hasta 3 o mas días para que (T/N) saliera de la habitación exhausta junto con un gran y hermoso telar hecho a mano.
¿¡¡(T/N) estas bien!!? -pregunto Naegi preocupado por la salud de su amada.
Ve ... y vende el telar- y tras decir eso la joven cayo rendida en el suelo de la habitación.
E-esta bien- acción seguida tomo el telar fue a la calle y lo vendió por un buen precio, lo suficiente para vivir bien hasta el próximo invierno.
