Hola chicos, se que nadie pidió esto pero yo llevaba tiempo queriendo escribir un Tsumugi x Saihara y decirle a wattpad que amo las craks ships así que sin más que decir disfrutenlo.
PD: en este one-shot iré variando los tiempos entre el pre-game y el juego soooo si encuentran el one-shot un poco raro no los culpo, yo también lo hice cuando escribí esto (No me hago responsable por los daños visuales por el cringe y asesinato a la literatura que voy a hacer en este one-shot)
Tsumugi x Saihara
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"¿cual es tu sueño?"
He escuchado esa pregunta inumerables veces pero y aún así sigo sin sabero y nisiquiera recuerdo la voz que alguna vez me lo dijo si me lo preguntase ahora no sabría que responder ¿cual era mi sueño?¿qué quería antes de llegar al juego de matar? No lo sé, recuerdo todo antes del juego de matar con claridad pero sin importar que, siempre falta algo, se siente vació, frío y confuso cuando me lo pregunto así pero aun si quisiera parar mi mente no me da tregua y la sensación persiste día y noche, aferrandose dentro de lo mas profundo de mi alma, hasta que siento que una voz suave y calida me llama sacandome de mis pensamientos.
- ¿Saihara-kun te encuentras bien?-
- S-si Akamatsu-san, no te preocupes, no es dada importante-
-ya veo, entonces sigamos con el juicio-
Asenti levemente y volvimos al juicio por el asesinato de rantaro amami, el juicio ya habia impezado hace un rato ya había empezado y sentia un mal presintimiento al respecto, aun no definiamos bien las cosas con respecto al asesino pero ya habiamos aclarado algunas cosas con respecto al asesinato, pero para bien o para mal las cosas darian una drastico cambio dentro de poco.
-¿y si Saihara-san es el asesino?-
pude escuchar claramente esas palabras salir de la boca de los demas, no, no habia forma, ¿acaso creian que yo era el culpable? no podia ser cierto, yo, yo, yo, yo me sentía tan mal y de la nada pude sentir una voz sacándome de mis pensamientos pero no de la forma en la que Akamatsu-san o los demás lo hacían.
Está era una voz suave y calmada que me dirigía poco a poco hacía un camino incierto, no sabía cuál era el camino de la verdad o el camino de la duda, era un camino incierto pero mágico pudiendo sentir como aquella suave y apacigue voz que de alguna forma lograba calmar todos mis miedos hasta que de la nada escuché a esa voz decirme algo que nunca imagine.
—Akamatsu-san es la asesina ¿No lo crees?—
Aquella voz tan suave y calmada soltó aquellas palabras como un balde de agua fría que para bien o para mal no causó ningún efecto en mi o en mi cerebro, o eso es lo que me hubiera gustado decir, las dudas empezaron a invadir poco a poco mi cerebro no reaccionaba y sin dudarlo ni un segundo mi mente asimilo aquella información dada pensando sobre las pistas que habían, eran tan pocas pero a la vez tantas, me perdí en mi propia mente pensando en lo dicho por aquella voz hasta que pude oír algo, algo que, sin duda alguna, me dejó sin aliento, era una mentira, la mentira de Akamatsu-san, me quedé sin habla y solo mire exeptico el resto del juicio y cuando Kaede se sentenció a si misma lo entendí, ahora lo entendía todo y estaba listo para hacer que los demás también.
...
Termino el juicio y con el la vida de Akamatsu, y con el mis problemas también fueron ejecutados junto a ella, hace mucho tiempo atrás quise hacer lo mismo con mi propia vida pero Danganronpa me salvo, a diferencia de el yo lo recordaba todo, cuando nos conocimos fue desastroso, cuando nos conocimos fue por este juego y por eso dimos nuestro cuerpo, alma y vida para hacero realidad incluso si esto no llevaba a la muerte.
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El dúo de jóvenes sonrió mientras miraban las pantallas de sus celulares, la chica de cabellos azules miro con ansias su Twitter en dónde pudo ver que habían sido aceptados para participar en el próximo Danganronpa, Ella como mente maestra y su compañero como coprotagonista, los dos se miraron con alegría y se abrazaron el uno al otro, para la peliazul fue un momento mágico, pero para el pelinegro fue solo otro momento.
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Frunció el ceño apunto de estallar en cólera, era un sentimiento de irá, dolor y desepción, se sentía abandonada, abandonada por lo que más quería pero no era nada nuevo dentro de su vida, el ciclo de abandono y desepción continuaba y aún así por más que las mentiras saliesen de su boca como balas no se acostumbraba del todo, desde pequeña había sido así pero nada había cambiado desde ese entonces, su vida seguía siendo de color un color gris en un mar de contantes cambios que, constantemente le azotaba sin piedad alguna por sus sentimientos o por su propia vida tan siquiera, primero con el divorcio de sus padres y luego con sus estúpidos compañeros de clase, intento varias veces dar el salto pero nunca logró volar, hasta que por primera vez los mares se calmaron y a su vida llegó un cielo despejado al cual dió por nombre Danganronpa y junto aquell bello cielo despejado lo encontró a él y lo atesoro como su más grande tesoro y amo cada momento a su lado, por qué incluso en esa oscura vida el era su luz, por qué incluso ahora el seguía siendo su luz, una luz que brillaba con fuerza e intensidad a su lado, es por eso que se despidió, incluso luego de haber obtenido dos sus fragmentos de esperanza, ella solo se despidió una vez más, una última vez y separando lijeramenente sus labios dijo lo que nunca tuvo que decir para saber su respuesta.
—Te amo
Fueron sus últimas palabras que se perdieron junto a los leves susurros del viento que viajaban por la infinidad arrastrando sus palabras, el detective no oyó nada, no tuvo que oír nada para saberlo, no nesecitaba oir nada para saberlo pero le dolía, lo que alguna vez faltó en su mente fueron esas palabras, lo que alguna vez faltó en su mente fue esa chica y en ese momento se dió cuenta que lo que creía saber no era nada más que lo que le habían hecho creer y ahí lo recordó todo, conosieron y se hisieron amigos, el tiempo que habían pasado junto y cuando ella le pregunto con esa armónica y tranquila "¿Cuál es tu sueño?" Se odiaba, se odiaba por nunca haberlo visto antes, para el era doloroso, muy doloroso y sin darse cuenta una lágrima resbaló por su mejilla y sin decir nada más ayudo a salir a Himiko mientras mira hacia el frente y de igual manera en un débil susurro al igual quel de ella respondio.
—Mi sueño hubiera sido estar a tu lado
—El mío también.
Pudo escuchar como una voz respondia a sus espaldas pero al darse la vuelta no había nadie, no había nada, solo nego levemente con la cabeza y salió, salió junto a los demás al mundo.
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