capitulo 35

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Capítulo 35

-       Regresare a la cena – le guiño un ojo a Elliot que se  encuentra en la aún falta algunas horas para que salga el sol – te llamare cuando llegue a la universidad.

-       Ve con cuidado nena – me jala a la cama para poder abrazarlo – mucho loco sale a las calles.

-       Tendré cuidado – susurro contra su pecho.

-       Suspira – te amo regresa pronto – me abraza más fuerte.

-       Lo miro a los ojos puedo notar que guarda una preocupación en ellos - ¿estás bien?

-       Es que tengo un mal presentimiento – besa mis labios delicadamente.

-       Es solo eso veras que no pasara nada – la abrazo de vuelta – estaré en casa pronto.

-       Cuídate.

Salgo de mi casa después de tomar un delicioso desayuno. Conduzco por la carretera hasta que salgo de la ciudad de Seattle mi próximo destino es la ciudad Vancouver, llego a la interestatal y como no hay trafico puedo acelerar un poco más. Miro la hora son las siete de la mañana tengo que estar a las diez para mi entrevista con los chicos del periódico ¡voy a tiempo! Pongo algo de música para que el tiempo se vaya más rápido.

Odio cuando un lugar se queda mucho tiempo en silencio siempre me ha gustado escuchar un poco de música cuando estoy conduciendo no sé por qué per me hace sentir libre. Escojo una de mis canciones favoritas de Coldplay viva la vida. Mientras que voy conduciendo viendo el amanecer al horizonte coreo alguna de las letras de la canción.

Después de hora de viaje y muchas canciones reproducidas claro que algunas cuantas llamadas de Elliot para saber que estoy bien al fin veo la ciudad de Vancouver la cual se levanta al horizonte. Al entrar a las calle no puedo sentir un poco de nostalgia de mis épocas universitarias, cuando solo éramos solamente Ana y yo preocupadas por sacar nuestras carreras al delante. Niego con la cabeza ahora estoy yendo a la universidad para dar una entrevista y algunas charlas para los nuevos miembros del periódico el cual tiempo atrás era editarlo ¡los buenos tiempos!

Llego al parqueadero de la universidad y dejo mi coche cerca de la entrada donde se encuentra las instalaciones del periódico, antes de entrar llamo a Elliot para que esté tranquilo.

-       Hola nene.

-       Nena ¿Dónde estás?

-       Entrando al periódico – le sonrió – estoy muy ansiosa.

-       Kate eres la mejor y se lo vas a demostrar ¿ya te dije que estoy orgulloso?

-       Suelta una risita – si me lo has dicho más de una vez.

-       No son suficiente ¡estoy muy orgulloso! Soy un suertudo porque tengo como esposa a la mujer más inteligente, apasionada, amorosa, honesta, más hermosa del universo y la lista sigue – se ríe con cariño.

-       Gracias Elliot – mi voz suna emotiva – yo soy afortunada por tener en mi vida.

-       Esta noche cenaremos tu yo ¿Dónde quieres ir? Tenemos que festejar esta ocasión.

-       Sorpréndeme – suspiro – te tengo que dejar.

-       Te amo Kate regresa a casa sana y salva.

Elliot y Kate por siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora