Día 2 Fantasía/Sirenas

1.1K 103 35
                                    

« Pronto conoceré el mundo humano» se decía a sí mismo el sireno Kirishima mirando su colección de objetos humanos. La verdad no sabía para qué servían la mayoría, pero es las consideraba objetos de gran valor.

— ¡Con que aquí estás!— dijo la sirena Mina, cuya cola era de un vivo color rosado y su top de color azul celeste. Ella era la única que conocía su escondite — Tú padre te está buscando —

— Si, princesa — dijo Kirishima sacando de su bolso una nueva pieza para su colección, era una caja musical muy oxidada en ella se mostraba una pareja de humanos bailando.

— ¡Kirishima!—

— Por favor, princesa, no haga tanto escándalo. No subí a la superficie — se voltea y le sonríe — Prometí que subiríamos juntos, nuestros cumpleaños se acercan cada día más —

— ¡Si!— sonríe la princesa — Ahora démonos prisa que si no tu padre nos hará a los dos brocheta de pescado y brocheta de tiburón —

Ambos salieron del escondite y nadaron a palacio.

— Oh, por cierto, Kirishima — dijo Mina golpeando su hombro — Deja de llamarme princesa cuando estemos solo los dos, ya te dije que me puedes llamar por mi nombre —

— Perdón, Mina es la costumbre— Rascó su nuca.

— Costumbre — en marca una Ceja — Nos conocemos desde que éramos unos niños, deberías acostumbrarte a mi nombre —

— Si, pero ahora es diferente. Ahora soy uno de los Caballeros o al menos uno de los aprendices a caballero del palacio y tú estás a nada de ser reina —

— Aún así, sigo siendo tu amiga — le sonríe — Tu amiga que te acompañará a ver el mundo humano—

A la edad de 15 años, a los habitantes de la ciudad de Atlantis se les permitía subir a la superficie... Para ver los horrores del mundo humano. Desde temprana edad a las sirenas se les relatan horribles historias sobre el mundo humano, sobre sus guerras por las tierras de los otro y sobre todo les contaban de los horrores que los humanos hacían a las sirenas.

Era obvio que todos crecían con miedo a ese mundo y muchas veces los quinceañeros se rehusaban a subir por miedo a ser vistos.

Sin embargo, Kirishima no se creía esos cuentos del todo. Y todo eso era por un hecho de su pasado.

Flash Back.

Tenía 7 años de edad cuando por accidente quedó atrapado en una red humana.

Forcejeo para liberarse pero eso ocasionó que su aleta se enredara y cortara.

Estaba muy asustado y no sabía que hacer. Su miedo se hizo mayor cuando un remolino marino le arrastró lejos haciendo que perdiera el conocimiento.

Cuando despertó estaba en una costa dándole la espalda al sol.

— Oh — escuchó que alguien exclamó, parecía la voz de un infante — Pero si es una sirena — al alzar la cabeza sus ojos rojos se toparon con unos ojos dorados como el sol.

— ¡A-A-A-Aléjate!— dijo Kirishima cuando el niño rubio se acercó más el esta vez mostrando una pequeña navaja. Seguro que ahí era su fin, le mataría y cortaría su cola para venderla al mejor postor. Era un simple niño, eso lo sabía pero su padre le había dicho que incluso de pequeños los humanos nacían siendo seres malvados. No se podía confiar en ellos.

Cuando el niño estaba a su lado con la navaja empezó a cortar la red que lo aprisionaba.

— Vaya que eres torpe, mira que enredarte en una red así — se burlo el rubio.

KiriKami week 2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora