-RIVALES- [DahMo] 《Adaptacion》

Capitulo 46 (Epilogo)

Momo estaba abriendo la puerta levemente, evitando emitir cualquier ruido, no queriendo despertar a la durmiente, aun.

Su esposa le había ordenado despertar a la niña, sus suegros se encontraban en un crucero por el mediterráneo y las dos adultas estaban encargadas de cuidar de la adolescente, hace dos semanas desde que llegaron a la casa.

Despertar a la chica de dieciséis años ya formaba parte de la rutina, ya que Momo era la única capaz de interrumpir el sueño de la chica sin terminar lastimada.

Si su esposa intentaba despertar a su hermana menor normalmente terminaba golpeada por una almohada o recibía quejidos negativos de la niña, por esa razón Momo era la encargada de levantarla todas las mañanas.

-Eh, despierta, bella durmiente- comenzó diciendo la ojimarron, sentándose en el borde de la cama y sacudiendo levemente sus piernas.

-Mmm -fue lo único que recibió como respuesta.

Momo inspeccionó el cuarto de la chica, aun sin levantarse de la cama, algunas revistas y la ropa regada por el suelo. El ordenador estaba encendido y mostraba la aplicación de iTunes abierta, parecía que alguien se quedó hasta tarde escuchando canciones de Miss a y 2pm

Momo sonrió, era en parte su culpa que la adolescente tuviera un obsesión con esos grupos ya que desde pequeña la ojimarron le regalaba discos de sus artistas favoritos para su cumpleaños.

-vamos, Yeri, tienes que despertar -insistió Momo una vez más lazándose juguetonamente sobre el pequeño cuerpo de Yerim bajo las mantas.

Yerim volvió a gruñir acurrucándose más en la cama e intentando apartar a su ojimarron favorita de encima, aun no entendía como su hermana soportaba ser despertada por Momo todos los días. Era muy entusiasta y lo peor era que le daba resultado, siempre las dos hermanas Kim terminaban obedeciendo a Hirai.

-No, Momo, vete -dijo jadeando por falta de aire cuando Momo volvió lanzarse aplastando su estomago - ¡Arhg!-

Aun así se resistió, ayer había durado hasta tarde escuchando música y mirando por la ventana, ella quería dormir al menos unas...doce horas más, si, aquello se escuchaba de maravilla.

-Déjame.

-Pero ya es de mañana, tienes que ir al instituto -le intentó quitar la almohada de la cabeza forcejeando durante un rato.

Ahora por culpa de la ojimarron la rubia estaba más despierta de lo que quería estar, ella gruñó nuevamente. Se resignaba a moverse de la cama, eso hasta que algo de lo que dijo Momo le llegó con claridad a la cabeza: instituto.

De un salto se incorporó en la cama, logrando hacer caer a Momo al suelo.

Yerim se rió un poco, su cuñada podría tener veintisiete años pero aveces era casi tan infantil como ella. Ni hablemos de su hermana, Dahyun aun saltaba por los regalos el día de Navidad.

-¡Tengo que cambiarme, se me hace tarde! -la menor de los Kim pegó un salto corriendo al cuarto de baño, parecía entre emocionada y feliz.

-Pero ¿Ahora por que tanto entusiasmo?

Momo rascaba su cabeza formando una mueca ya que le dolía el trasero ¿Por que los pisos de madera debían ser tan jodidamente duros? ¿Cual era la necesidad?

Yerim volvió a salir del baño quitándose el pijama y cambiándose a trompicones por unos short y un jersey, Momo alzó su ceja observando el apuro de la chica.
-Descuida, Yeri, aun faltan veinticinco minutos. Puedes llegar -anunció

Yeri le miró sacandole la lengua y con los ojos brillantes, cepillando su cabello.

-No tiene nada de malo ser puntual ¿Verdad?-respondió la menor.