te odio por haber nacido,
te odio por ser siempre la culpable de todo,
te odio por siempre arruinar mi vida,
te odio por siempre hacerme hacer cosas buenas y después recordarme que me quedaré atrás de todos modos,
te odio por nunca haberme dejado ser yo,
pero sobretodo te odio por hacerme ilusiones y esperanzas respecto a que alguna vez florecería; porque me terminaste marchitando.(una carta de mí para mí).

ESTÁS LEYENDO
Ansiedad
PuisiEscribo poesía cuando me encuentro con crisis de ansiedad. Y quién sabe, a lo mejor, más de uno se siente identificado.