- Wow sí que sabes hacer todo tipo de deporte ehh- tienes pensado dedicarte al mundo del deporte?
- no, mi familia se dedica a la industria del deporte, es algo que me enseñaron desde pequeño
- no hablaras en serio ¿verdad? Con tu figura y condición, sería un desperdicio no hacerlo
- si eh, que envidia tu condición
El pelinegro sonrió de medio lado, lo que ellas no sabían era que él no quería nada que ver con los deportes, a él le gustaba mucho más la idea de ser modelo, no es que se refiriera a ese tipo, si no que... Siempre le avía gustado la idea de vestir un traje, y pues tal vez si trabajara en una agencia lo usaría todos los días, pero lo que él quería era diferente, no solo eran los trajes, si no... Esa ropa extravagante y extrovertida
- bien, voy por algo a la cafetería ahora regreso
El castaño salió lo más pronto posible de su salón y comenzó a caminar, necesitaba algo de comer, lo que sea pero que lo mantuviera ocupado y satisfecho
~~*~~
Iba regresando de la cafetería, llevaba una barra energética, le daba mordidas como si fuera su único alimento
- !dios santo!, La comida de aquí es un asco - volvió a ver la barra y le dió el último mordisco
Sin ningún interés o motivo volteo la cabeza y vio a un chico, un tanto pequeño y delgado, su cabello era blanquisco y estaba de puntillas tratando de presionar el botón de la máquina
-"no cabe duda que todo lo que hacen las personas pequeñas es tierno y adorable" - pensó el castaño
Se apresuró a alcanzar el botón y presionarlo
- que malos son las personas que crean estas cosas ¿No?, para que ponen tan alto algo de uso público - el castaño bajo la mirada en cuanto el pequeño la levantó
Sus mirada se encontraron y el estómago del castaño dió un vuelco, y su corazón dió comienzo a una carrera desenfrenada, sus ojos azul celeste, tan hermosos, tan especiales, tan únicos....
- gracias... - la voz del paliblanco resonó en cada espacio de el castaño haciéndolo sonrojar aún más, esa voz tan pequeña pero dulce y a la vez tan seria hizo que su cerebro se desconectara
...
Cuando reacciono el pequeño ya no estaba, se confundió tanto que no sabía si lo había visto, o solo era un producto de su imaginación por estar pensando en el por la noche
- ¿Ya no está?, ¿A dónde fue? - giro hacia todas direcciones pero no encontró nada
Giró sobre sus pies y se quedó parado frente la máquina donde minutos antes estaba su angel, suspiro y pensó
"Esta es la segunda vez que me lo encuentro en la escuela...- abrió
los ojos como platos mientras en su boca se formaba una perfecta o - entonces el debe ser...."- ¡¡Por dios, me está cuidando!!, ¡¡ De verdad existen los angeles en este mundo!!, ¡Tiene una voz maravillosa!, ¿Será que estoy alucinando?, ¡Que suerte tengo! - se puso de cuclillas y suspiro, serró sus párpados recordando la cara de aquel chico y sonrió inconscientemente
Ese día se dió cuenta de tres cosas
1. Su pequeño angel tenía pecas por sus mejillas hasta llegar a su nariz, simplemente le quedaban perfectas
2. La voz del pequeño era tan hermosa, no tenía palabras para describir lo bien que le hacía escuchar su voz
3....
- Eres mi ángel guardián...