Cual lágrima contrastada con los mares
Como un coro de iglesia en contraste con las aves
Cual vanas promesas en lugar de actos verídicos
Como mil espadas en mi pecho y mi dolor casi oníricoMas el débil susurro de los catárticos vientos
Opaca con desdén el lapidario in crescendo
Del torrente espectral de los fatídicos recuerdos
Del parásito ignoto del parasiempre y su falso eternoMe pregunto si es tan malo extrañar cuotas del pasado
Pues en varios momentos reconforta más un amor esfumado
Que la intensa realidad que irradia tristeza y agonía
Y pierde sentido hablar de un mundo extinto, perdido en la lejaníaParece una cruda broma del destino, sin un ápice de gracia
Cada fecha especial que nos toca, una maldita tormenta nos azota
Hierve la sangre de nuestras venas y los corazones se confrontan
No hay más que el silencio que sentimos por la derrotaEvapóranse los recuerdos de un amor de un minuto a otro
Entra en la boca como un disgusto líquido despreciable
Tan sencillo es destruir una condenada sonrisa amable
Ni hablemos ya de permitir a los temores con el odio fusionarseEstá en guerra mi alma, luchando por saber qué decisión tomar
Batallan por tu indiferencia, tu belleza y tu forma de amar
Culpa, culpa, dolor, dolor, tierra trágame, mátame por favor
Pasé tanto por esto que ya no queda mucho de mi corazónNo hay mensajes, llamadas, ni tan siquiera una débil señal
No hay paz, sosiego, una niebla indeleble me persigue a cualquier lugar
Vientos de quasi primavera que se me antojan otoñales
Y tú permaneces impasible, en los límites de lo indeseablePuta mierda, volvió el monstruoso del pesar en mi pecho
Como si un camión de mil libras me pasara por encima
Y cual mis sentimientos revoltosos se dibuja el clima
Parece hecho aposta por un Dios sin demasiada empatíaTétricos pensamientos se abalanzan sobre mí en las heladas noches
Provocándome un insomnio perpetuo e inenarrable
Arrastrándome hacia el delirio, hacia lo imperdonable
Socavando mi mente, hundiéndome en el abismo más deleznableDonde no llega luz, no hay sentido, no hay nada, un vacío profundo
Navego en la oscuridad con las sombras de mi infortunio
Añoro huir del sufrimiento humano al que estoy entrelazado
Sólo que mientras tú estés en mi pensamiento, seguiré por siempre condenado