Reflexión /1/

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A veces sentimos que estamos vivos, por supuesto, pues lo estamos. Pero no sabemos cómo vivir.

Hay momentos en los que sentimos que se nos van cayendo piedrecitas encima, que poco a poco van creando una montaña sobre uno mismo.
Y terminas por hundirte.

Intentas dar lo mejor de tí, pero las cosas no salen como esperabas. Crees que te estás quedando sin fuerzas y sin ánimo para seguir...

Es en ese mismo instante cuando tú corazón comienza a enfriarse.

Y es que por más que lo intentemos, siempre habrán factores que nos afectarán negativamente...

...haciéndonos creer que yace en nuestro interior algún tipo de maldición o mala racha, que no nos permite avanzar ni mejorar en ninguna circunstancia.

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Pues bien, es éste un sentimiento muy común en nosotros, los seres humanos.
Existen frases o refranes comunes muy conocidos y que nos demuestran la predisposición al fracaso con la que todos venimos programados desde niños a tal punto que en nuestra sociedad, incluso los miembros de nuestra familia, tienden a indicarnos que la mayor probabilidad en cualquiera de nuestros emprendimientos es la de fracasar.

Esto es debido a que la mayoría de las personas intentan ver con mayor prioridad lo malo y es de esperar, en un mundo en el cual se juzga a otro por lo que hace o deje de hacer.

Pero entonces... se debe ir en contra de la corriente?

La respuesta ideal: SI

Si alguna vez has sentido que todo te sale mal, y probablemente piensas que otras personas son mejores que tú, pues querido lector, déjame decirte que no eres el único... muchos lo hemos sentido, jóvenes, viejos, niños... de vez en cuando hay motivos para que se de lugar a grandes coincidencias, consecuencia de nuestros propios actos.

Nuestro cerebro es capaz de procesar unos sesenta mil pensamientos al día, desde que nos levantamos, hasta que nos acostamos, estamos pensando. Incluso dormidos pensamos, pero ese ya es otro tema.

La mayor parte de nuestros pensamientos son automáticos, a tal punto que en ocasiones no nos damos cuenta de que estamos pensando, y más aún, no somos capaces de pasar un solo instante sin pensar en nada, es casi imposible.

Todos esos pensamientos, están relacionados de alguna manera u otra con el acontecer diario y nuestras vivencias, de manera que lo que pensamos se relaciona con lo que vivimos (lógicamente).

Y luego, lo que pensamos se convierte en aquello que sentimos... pues de nuestros pensamientos, surgen nuestros sentimientos, tan complejo como pueda parecer.

Y a que va todo esto?

Simplemente a que con base de que nuestros sentimientos son formados por lo que pensamos a diario, si hay una forma de manipular los pensamientos, es con lo que sentimos.

Así pues, si día a día nos enfocamos en lo mal que nos va, y no dejamos de pensar en lo negativo, pues más y más pensamientos, sentimientos de culpa y negativismo aparecerán conforme el efecto «bola de nieve» tome acción.

Fíjate en todo esto que tienes ahora mismo y no en lo que perdiste. Porque no es lo que el mundo te quita, es lo que haces con lo que te queda:

Cada vez que llueve deja de hacerlo. Cada vez que te dañas te curas. Después de la oscuridad siempre hay luz. Nada dura para siempre. Si las cosas van bien ahora disfrútalas, no durarán siempre. Si las cosas están mal no te preocupes porque no durarán tampoco para siempre.

Que la vida no sea fácil en estos momentos no significa que no puedas reír. Sólo porque algo te esté molestando no significa que no puedas estar alegre. Cada momento te da un nuevo comienzo y un nuevo final. Tienes una segunda oportunidad cada segundo. Sólo tienes que cogerla y hacer lo mejor de ella.

El dolor es parte del crecimiento

A veces la vida nos cierra las puertas porque es el momento de seguir adelante. Y eso está bien porque a menudo no nos movemos si las circunstancias no nos obligan a ello.

Cuando sean tiempos difíciles recuérdate a ti mismo que el dolor no viene sin un propósito. Cura tus heridas pero nunca olvides qué te enseñaron. Todo saldrá. Quizá no inmediatamente, pero sí con el tiempo.

No dejes que las sombras del pasado oscurezcan las puertas de tu futuro. Hay alguien muy grande esperándote ahí fuera. Deja de quejarte de tus problemas y empieza a ser agradecido por todos los problemas que no tienes.
Siempre es mejor intentar hacer algo y fallar que no hacer nada y triunfar. Esto no termina si pierdes. Termina cuando no haces otra cosa que quejarte sobre ello. Si crees en algo sigue intentándolo.

Así que si vas a intentarlo, dedica tiempo y recorre todo el camino. De lo contrario no tiene sentido que salgas.

Y merece la pena. Así que si vas a intentarlo ve hasta el final. No hay mejor sensación en el mundo que saber lo que significa estar vivo.

Es un viaje largo. Tienes que dejar de preocuparte y dudar de cada paso que das en el camino. Ríete de la confusión, vive conscientemente el momento y disfruta de tu vida conforme se desarrolla. Es posible que no termines exactamente donde tienes intención de ir, pero es probable que llegues precisamente donde necesitas estar.

No permitas que la amargura de otro cambie quién eres. Es más, no se te ocurra cambiar sólo para impresionar a alguien que dice que no eres lo suficientemente bueno.
Si cambias que sea porque quieres convertirte en alguien mejor y tener un futuro más brillante. La gente va a hablar, independientemente de lo que hagas y cómo lo hagas. Así que preocúpate por ti mismo antes que preocuparte por lo que otros piensan.

La verdadera fuerza nace de superar lo que otros creyeron imposible. Vida sólo tienes una. Esto es así. Haz lo que te haga feliz y estate con quien te haga sentir bien.

➴Memorias Nocturnas [Escribiendo...]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora