Capítulo 1

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Camila estoy enamorado de ti.— Austin se acerca a mi y toma una de mis manos. Gruñó al escuchar en la forma que se dirije a mi, nadie tiene el derecho a llamarme por mi nombre si yo no sé lo ordenó.

Cuando te he dado la libertad de tutearme.— Libero mi mano de la suya, este situación me parece bastante desagradable, suspiro agotada y termino de abrocharme los pantalones.

Se que no me amas pero por favor dame la oportunidad de enamorarte, déjame demostrate que puedo hacer feliz.— Levantó de mis ceja.

*!Mentira!*

Las palabras de mi loba suena como un fuerte gritos en mi cabeza, mi cuerpo se tensa al recordar lo que pasó hace años atrás, se que eso la afecto igual o más que a mi por esa razón decidimos guardar nuestro corazón en una caja fuerte de la cual sólo una persona tiene la clave, nuestra Mate.

No digas estupideces Austin.— Termino de arreglarme la ropa. Comenzó a caminar hasta la puerta de la entrada, tengo muchas cosas que hacer no puedo seguir perdiendo mi tiempo con el.

Sonrió al sentir el viento en mi cara, la brisa fresca hace que los problemas se me olviden, colocó mis manos en los bolsillos de mis pantalones, continuo caminado con aquella sonrisa en sus rostros como los niños juegan libremente sin ningúna preocupación, estas son las cosas que me dan a entender que mi trabajo como alpha a sido y seguirá siendo bueno.

Para muchas personas el cargo como alpha es solamente un comodín para poder tener poder y riquezas, muy pocas personas toman este cargo con la responsabilidad que se merece ya que la mayoría lo que hace es infundir una dictadura. Yo siempre he tratado de que en mi manada todos se sienten libres mi misión como alpha siempre a sido y será tener a todos felices y seguros.

Sigo caminando mientras me delaito con la gran belleza de las flores de mi jardín, me detengo en frente de las puerta principal de mi casa.

*Algo anda mal, escucha.*

Mi loba tenía razón, dentro de la casa se escuchaban unas voces un tantos alteradas, enojada abro la puerta rápidamente. Estoy cansada de decirle al personal que no deje pasar a nadie mientras no estoy.

Entro a la casa con pasó decidido me dirijo al comedor ya que de ahí provenían las voces, al llegar a este pongo los ojos en blanco ya que veo a dos personas muy conocidas para mi, los organizadores de aquel alboroto era nada más y menos que mis padres, tosi falsamente para obtener su atención.

¿Porque este alboroto?.— Me apresuró hablar antes de que mi madre lo haga.

Hija que bueno que aparecistes puedes creer que no nos querían pasar.— Mi madre le dirige una mala mirada a unos de los empleados.

Ruedo los ojos, mi madre y sus dramas. Les indicó a los empleados que nos dejen solos y me dispongo a preguntarle a qué se debe su presencia aquí.

Necesito una razón para venir a visitar a nuestra hija.— La voz de mi padre sale en tono de reproche.

Suspiro de cansancio.— Discúlpame papá es que estoy un poco estresada.— El asiente.

Ya saben que esta tambien en su casa así que póngase cómodos yo iré a descansar un rato.— Doy media vuelta dispuesta a salir de la cocina pero la voz de mi madre me detienen.

Necesito hablar de un tema muy importante contigo hija.— Le hago una señal con mis manos para que me siga a mi oficina, no se que es lo que tenga que hablar conmigo pero mientras más rápido me lo comunique mejor.

¿Cual es el tema tan importante que querías hablar conmigo?.— Me dispongo hablar desde que cruzó la puerta de mi oficina.

Es sobre tu Mate hija.— Mi cuerpo se tensa al escuchar la palabra “Mate”, ella sabes muy bien que no me gusta que me atormenta con ese tema.

Ya se he dicho que no quiero hablar de ese tema.— Un gruñido involuntario sale de mis labios.

Hija sabes muy bien que si no encuentras a tu Mate tienes que marcar a otro hombre para que te ayude a gobernar la manada.— Apretó mis puños a tal punto que mis nudillos se tornan blancos.

El único hombre que va a tener derecho sobre mi y mi manada.— Chocó los puños contra la puerta provocando que esta haga un sonido insoportable.— Es mi Mate.

P..per..— Ella trata de hablar pero no se lo permito, abro la puerta.— Está conversación ya se terminó, te puedes ir.— Hago un movimiento con mis manos indicandole que salga.

Se retira sin decirme no una sola palabra más, respiro profundo y lanzo al gran mueble que se encuentra del lado derecho de mi oficina.

Espero encontrarte pronto.

En otra parte.

Que vamos hacer.— Veo la preocupación en sus ojos al pronunciar esas palabras.

No tengo idea Shawn.— Suelto un gran suspiro.

Veo como Shawn levanta a nuestra pequeña niña de tan sólo tres años, en este tiempo todo a sido muy difícil ya que al yo ser brujo y Shawn un lobo las personas nos impedian estar juntos pero siempre nos las arreglamos para vernos a escondidas de los demás principalmente de su padre el alpha de la manada “luna sangrienta” una de las manadas más despiadadas y peligrosas, el nunca acepto que su único hijo alpha estuviera con un simple brujo o al menos eso creía el.

Recuerdo el día que Shawn medio la noticia de que esperaba una bebé, en ese momento todo era felicidad pero nuestra dicha fue interrumpida por el odio de su padre, el no quería ni aceptaba que el futuro alpha fuera descendencia de un brujo por esa razón me mandó asesinar para después mandarle a practicar un aborto a Shawn, al enterarnos de eso decidimos espacar con nuestra bebé. Todos estos años hemos estado viviendo tranquilos en una pequeña casa en el bosque muy lejos del padre de Shawn, pero hoy nos hemos dado cuenta que ellos dieron con nuestro paradero.

Tenemos que irnos ya están muy cerca puedo percibir su olor.— Hablaba Shawn desesperado.

—Vamonos.....—

Las palabras se quedaron en el aire al escuchar un gran estruendo en la puerta principal, ya han llegado ya están aquí.

Veo como un gran grupo de lobos rabioso entran a la casa, le digo a Shawn que salga lo más rápido posible por la puerta trasera. El se niega en un principio a dejarme sólo pero después piensa en nuestra pequeña tesero, no voy a permitir que le hagan daño.

Veo como Shawn sale corriendo a toda velocidad, ningún lobo se a percatado de su escapé, veo como todos los lobos me rodean en posición de ataque.

Espero que la diosa luna los proteja.

Narra Shawn.

Salgo corriendo a toda velocidad por la puerta trasera, siendo como las lágrimas resbalan por mis mejillas, amor espero que estés bien.

Me pierdo entre las grandes árboles del bosque, siendo como mis piernas comienzan a flaquer pero no me doy por vencido, no ahora, que tengo que proteger a mi niña.

Puedo ver cómo los árboles van desapareciendo y comienza a verse una gran muralla, estoy solo significa una cosa que estoy cerca de una manada.

Me detengo y miro a mi niña la cual está dormida entre mis brazos, Suelto un suspiro y con este una lágrima, beso cada una de sus mejillas y lo coloco delicadamente en el suelo, me empezó alejarme lentamente pero antes de perderme en el bosque grio la cabeza y le doy una última mirada.

Nunca olvides que Papa te ama.


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Eres Mia Pequeña (Camila Cabello Y Tu G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora