ADAPTATION

It's not a game

-¿Cuándo pensáis iros?- Preguntó Jonghyun, sentándose en una de las mesas de la panadería, había quedado con Kibum para desayunar allí.

Ya había dejado de nevar, pero seguía haciendo bastante frío y a veces lloviznaba. Por eso las calles estaban casi vacías, solo algunos kamikazes en busca de provisiones para el fin de semana.

-Esperaremos unas semanas tras año nuevo. Los padres de Jinki nos ayudarán con la mudanza. Hemos encontrado un departamento pequeño en la ciudad. – Respondió Taemin, dejando una taza de humeante chocolate delante de Jonghyun.

-Sí también he encontrado un trabajo. No pagan mucho, pero nos servirá para empezar. – Jinki se unió a ellos, aprovechando para abrazar al menor por la espalda, inclinando la cabeza en dirección a Jonghyun a modo de saludo, una sonrisa brillante alumbrando su rostro.

Esos dos parecían estar en sintonía, encajaban demasiado bien el uno con el otro, casi causaba envidia ver aquella imagen. Aunque Jonghyun no sabía si sentía celos por Jinki, Taemin o la relación tan abierta que mantenían.

-Yo...- El menor bajó la mirada, el rostro acalorado, azorado y nervioso. – Volveré a estudiar, quiero al menos terminar el instituto. Ahora me es muy difícil encontrar un trabajo. No es que pueda pedir referencias, bueno sí. Pero no serían las adecuadas. Buscaré algo mientras estudio, pero...- Bajó la voz, casi susurrando al oído de Jonghyun, inclinándose sobre él. – Los padres de Jinki no quieren que trabaje por obligación, dicen que cuando termine al menos el instituto tendré más opciones.

Ver aquella sonrisa genuina en los labios de Taemin, al que había considerado prácticamente un hermano desde hace lo que parecían siglos. Le hacía sentir una calidez inmensa en el pecho. Lo peor de todo es que aquel maldito estado de ánimo parecía ser contagioso. Jonghyun se encontró a si mismo sonriendo para ellos.

Un tintineo suave interrumpió la conversación. Kibum entraba por la puerta, cerrando el paraguas y eliminando algunas gotas de agua del pelo antes de quitarse el abrigo y dejarlo en una silla. Parecía algo malhumorado cuando se sentó a la mesa, al lado de su novio, ¿se podía llamar novio? Al lado de Jonghyun, mirándole de reojo.

-Hace un tiempo horrible, así no se puede hacer nada. –Se quejó de inmediato, pasándose una mano por los cabellos húmedos.- Jinki, ¿puedes prepararme un café? Bien cargado, necesito una buena dosis de cafeína.- Dijo antes de saludar a Taemin, apoyando una mano en la rodilla de Jonghyun. - ¿Desde cuándo bebes chocolate?

-Estoy intentando cuidarme, mi madre, mi hermana y los médicos no me dejan vivir si hago algo que no sea adecuado para mi salud.- Se quejó, tomando la taza con una mano, soplando antes de dar un par de tragos.- Además, está rico, lo ha preparado Tae. Lo hace muy bien. Ah, ¿sabes que estos dos van a dejar el pueblo?

- ¿Os mudáis?- La sorpresa era evidente en el rostro de Kibum, sorpresa y algo más, pero desapareció en unos segundos. - ¿Tus padres lo saben, Jinki?

-Sí, ellos mismos nos ayudarán con todo, de hecho gran parte de los planes los han hecho ellos, no pueden estarse quietos. – Dijo echándose a reír, presionando el rostro en los cabellos de su pareja.

-Oh... Eso es bueno entonces, si necesitáis algo, podéis pedírmelo, haré lo que pueda. – Kibum sonrió de nuevo, retirando la mano de la rodilla de Jonghyun, para tomar la taza de chocolate de este, probándolo.- Vaya, sí que está bueno.

-¿Qué crees que puedo regalarle a Jinki? Si, ya sé que las navidades han pasado, pero no celebramos nada y me gustaría darle algo en año nuevo... -Taemin, estaba al teléfono, escondido en el baño de la habitación para que nadie pudiera escucharle. - ¿A Kibum? Eran muy amigos antes, pero ahora no tienen tanta familiaridad. Mmm, creo que lo único que puedo hacer es preguntarle a su madre... ¡No pienso presentarme desnudo y con un lazo!- Al alzar la voz se arrepintió al momento, asomándose a la puerta para comprobar que no había llamado la atención de nadie.