SHAZAM?

CAPITULO 7

Bueno, de tanto pensar me di cuenta que ya eran las 7:00 de la mañana y el instituto empieza a las 8:30. Así que me levante con toda la pereza del mundo, sin ganas de ir, pero como no vaya me doy por muerta. Me quite el pijama y me puse algo cómodo y abrigado para ir a clase.

Primero, bajé a desayunar, era muy pronto, recién eran las 7:14 y como supuse mi padre todavía no se había levantado. Segundo, cogí un paquete de galletas con leche y encendí la televisión, y luego subí a mi habitación para ordenar mi mochila.

Estuve un rato leyendo artículos de superheroes hasta que solo quedaban 30 minutos para que empiecen las clase. Agarré mi mochila y mi skate para dirigirme a clase. Cuando iba a salir de casa se levanto mi padre.

P.R:¿Qué hora es Robin?- dijo con una cara de dormido-

Robin:Buenos dias papá, son las 8:05 y ¿tú te tenias que ir a trabajar a las 8:15? -dije sin darle importancia-

P.R:¡Oh no! Es verdad, ¿por qué no me has despertado?-Dijo alterado.-

Robin:Porque... Bueno, hasta luego papá, te quiero, te veo después de clase.

Abrí la puerta y salí corriendo, segundos después me fui a clase en mi skate.

(En la entrada del instituto)

Me quede parada en la entrada, dudando si entrar o no. Hasta que escucho que alguien me habla. Era una niña pequeña de piel oscura con un niño a su lado de rasgos asiáticos.

?????:Hola soy Darla y él es Eugene. ¿Eres nueva?, ¿cómo te llamas?, ¿cuantos años tienes?,¿quieres ser mi amiga?, ¿te has mudado o ya vivías aquí?.-dijo con rapidez, mientras que el otro niño no aparto la mirada de su videojuego.-

Robin:Que tierna.-dije agachando para quedar a su altura-

Darla: Gracias.-dijo con una sonrisa.-

Robin:Pues yo soy Robin y tengo 15 años, me acabo de mudar y acepto ser tu amiga.-dije sonriéndole-

Darla:¡Enserio! *me abrazó* Entonces, ven, te enseño la escuela.

Me cogió del brazo, entramos y habían detectores de metales.

Darla:Creo que no puedes entrar aquí con el skate.

Robin:no pasa nada.

Me acerque a un guardia de seguridad y le pregunte si podía entrar con el skate. El hombre dijo que si, que no había ningún problema. Entramos y me hizo un pequeño tour por la escuela. Darla me contaba sobre sus gustos y cosas sobre la escuela, hasta llegar a dirección, ahí cogí mi horario e ir a mi clase, con la ayuda de Darla.

(En la puerta de mi clase.)

Darla:Vaya, ya hemos llegado. -dijo triste, a causa de su acción, me agache para abrazarla-

Robin:Nos vemos luego Darla. -Dije acercando mi mano al pomo de la puerta-

Darla:Espera,*me giré* ¿podemos quedar algún día?

Robin:Claro, pero ve a tu clase antes de que se te haga tarde.

Darla:Es verdad. *se va.*

Abrí la puerta, y gracias a mi presencia en la clase todos me miraron. Me puse nerviosa, y recordé lo de mi dislexia, lo peor es que es clase de matemáticas. Todos seguían mirándome menos la profesora que estaba apuntando algo en la pizarra, así que visualice un sitio vacío al fondo y fui a sentarme rápidamente. Pero cuando pase por detrás de la profe, ella puso su brazo encima mío , evitando que me vaya a sentar. La mire molesta y ella se dio la vuelta.

Profesora: Aquí no se permiten skates.-Dijo molesta-

Robin:¿enserio?, pues a mi el guardia de seguridad me ha dicho todo lo contrario. -Dije molesta enfrentando a la profe.-

Profesora: A mi no me hables así niña.-Decidí ignorarla, para después ir a sentarme en aquel asiento vacío.- ¡Ey!, he dicho que no se permiten skates. -dijo arrebatándome el skate de mi mano derecha.

Robin: Devuélvamelo, usted no tiene ningún derecho de quitarme mis cosas.-Dije frunciendo el ceño, enseguida intente coger lo que era mío, pero se aparto para que no cogiera mi skate.-Profesora: No se lo devolveré hasta que se presente. -rodé los ojos y solté un ok.- Me llamo Robin Bárbara Copper, tengo 15 años, me he mudado ayer y no me gusta que me quiten mis cosas. Ya esta contenta.

La profesora me miro amenazante y me devolvió el skate pero me susurró al oido "me las vas a pagar Bárbara", me fui a sentar en el lugar vacío, que estaba al lado de un chico castaño que no dejaba de mirarme. Me senté saque el libro y una hoja para dibujar, porque paso de copiar lo que apuntaba la profe en la pizarra. Hasta que el chico me habla.