Capítulo 11: Una Trizte Verdad.

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Los días pasaban, el niño había cancelado su regreso a konoha denido a toda la información que había recibido de parte del difunto sabio de los seis caminos, actualmente el niño se encontraba meditando en su cuarto, hasta que este fue traído a su espacio mental por el zorro gigante.

Naruto: ¿Qué ocurre, Kurama?

Preguntó confundido por la repentina intromisión de su inquilino.

Kurama: hace varios años, cuando konoha fue atacada, el cuarto hokage...

Antes de que pudiera seguir con su narración fue interrumpido por el niño.

Naruto: oh genial, una historia de mis padres, no me importa.

Dijo sarcástica mente, si bien su relación con el zorro era mejor, el tema de sus padres era un tema que siempre sacaba lo peor de él.

Kurama: el cuarto hokage estaba esperando pacientemente el nacimiento de su congénito, mientras su esposa, Kushina una de las pocas uzumaki vivas y jinchuriki del zorro de nueve colas, grito lloro y pujo sin descanso.

Naruto nuevamente lo interrumpió.

Naruto: si, si, si y nací, luego te liberas te del sello y ellos dos se sacrificaron para salvar konoha y así nació la gran cacería del zorro, que gran y estupida historia, si era sólo para esto entonces debiste ahorrar telo.

Dijo enojado, no sólo por haber casi perdido contra un zorro que no podía usar ni siquiera un cuarto de su fuerza, sino por tener que escuchar una tonta historia sobre sus padres con los cuales si bien ya había perdonado, aún se encontraba enojado con ellos por su incompetencia.

Kurama: hasta que un pequeño y saludable niño con bigotes había nacido, era idéntico físicamente, mientras por dentro era un uzumaki completamente. Los padres a pesar de lo agotados que se encontraban, la felicidad los desbordaba su primer hijo había nacido...

De pronto Naruto que se encontraba jugando con su espacio mental, fijando mirando de reojo al zorro que seguía contando tranquilamente su relato.

Kurama: pero tristemente la felicidad terminó demasiado rápido, un hombre con una máscara con un solo orificio te había secuestrado, bestia una capa negra, la máscara era una espiral de líneas negras y amarillas y llevaba unas cadenas soldadas a unos brazaletes de acero que llevaba. El había matado en el proceso a los dos médicos que te ayudaron a dar a luz.

Naruto: y Minato lo mató y me salvo y todos contentos, listo vámonos.

Dijo interrumpiendo al zorro.

Kurama: "dame al zorro relámpago amarillo" exigió el enmascarado acercando su mano a tu cabeza, tu padre a pesar de su gran velocidad fue incapaz de salvarte, pero gracias a los años viviendo con una uzumaki reconocía rápidamente el chakra de otro, permitiéndole encontrarte, pero antes de que saliera de la casa segura donde estaban dándote a luz por miedo a que descubrieran que existía, fue detenido por tu madre.

Naruto: creo que me estas ignorando, te estoy diciendo que no quiero escucharte.

Dijo interrumpiendo a su inquilino, el cual sabia que si el niño no lo quisiera oír ya se habría ido.

Kurama: "yo también voy" fue lo único que dijo la mujer y con una mirada hizo que su esposo se resignar ante la idea de que ella se quedara a descansar.

Naruto: pero recién había dado a luz, sería más un estorbo que un ayuda.

Dijo el kitsune poniendo atención a la historia del zorro.

Kurama: yo le dije eso, pero lo único que me decía era "es mi hijo, tengo que ir". Yo solo reía por su tontería, estaba tan preocupada por ti, que la muy tonta no notaba que estaba debilitando el cello que me mantenía atrapado dentro de ella, ya estaba pensando en que haría cuando fuera libre, lo primero sería devorar a tu madre y luego aplastar te a ti y a tu padre, comenzando por sus piernas, para que sufra mas.

El trato del zorro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora