Regresar [Boruto x Sumire]

#4

— Lo siento, lo siento. Quise decírtelo apenas me entere, pero pensé que Boruto debía ser quien te lo dijera, es un tema que realmente solo podía ser abordados por ustedes dos. Pero aun así, lo lamento, porque se el alivio que te podría haber dado, no estés molesta conmigo. 

Chocho me envuelve en un abrazo apenas me ve entrar en aquel cuarto de espera en la iglesia, y yo no mas le correspondo enseguida. Necesitaba, de su parte, un mimo como ese. 

Y obvio no podía enojarme con ella, con nadie que haya caído en la trampa de Kiri. 

Nos quedamos abrazadas por algunos minutos. Ella con su vestido de novia y yo con mi vestido de dama de honor. Un vestido sin mangas, color azul, y muy ceñido a la cintura. Me separo finalmente y ambas nos miramos fijamente. Chocho tenia lágrimas acumuladas en sus preciosos ojos color miel. 

Alzo un dedo y le acaricio un poco el borde, con cuidado de no arruinarle el maquillaje. 

—Ey, ey, nada de lamentos y temas triste. Hoy es tu día, querida amiga — la toma por las mejillas y le guiño un ojo—. Ya los invitados están por sentarse y Shinki se esta acomodando en el altar. La emoción se puede absorber Chocho, como si fueras una esponja. 

Chocho toma mis manos y las bajas, al instante las aprieta. 

—Sumire, solo prométeme algo.

Ladeo la cabeza, y fue cuando sentí que deje de podía fingir estar bien. 

— ¿Qué cosa?

—No te niegues a la felicidad ahora que sabes la verdad. Ese seria, de tu parte, un perfecto regalo de bodas amiga— Le miro sorprendida. Chocho sonríe—. Basta de sufrir, ustedes son los que tienen la decisión de perdonarse y regresar. Tu la tienes, nadie mas.

No digo nada. No quiero en realidad decir algo mas sobre el asunto. 

—Solo prométeme que pensaras darte una oportunidad si llega el momento ¿si?

Pero la verdad, aunque Chocho no me lo hubiera dicho. Yo ya lo había pensado desde anoche. Tan solo diez minutos desde que él se había marchado, había abierto mi puerta para salir corriendo a su dirección. Pero Boruto ya se había ido, su carro no estaba, y yo solo seguí llorando llena de frustración.  

Yoyo entro en ese momento anunciando que era hora de salir, e interrumpiendo cualquier cosa que hubiera dicho. 

La ceremonia paso sin mas contratiempos, los votos de ambos habían hecho sacar algunas lagrimas a los presentes. Cuando salieron de la iglesia, antes de marcharse ambos novios, Chocho muy entusiasmada lanzó el ramo de rosas, dando a parar en las manos de Sarada, quien muy sonrojada miro hacia Araya, quien no estaba mejor que ella.

Alzo una mano de despedida cuando ambos novios finalmente se marcharon. Sonrío, su luna de miel los esperaba. No podía estar mas feliz por Chocho.  Cuando aun íbamos a la universidad, ella siempre me profesaba su miedo al no encontrar el amor. 

Siento una mirada sobre mis hombros y giro de inmediato. Boruto me observaba desde el inicio de la escalera de la iglesia. Su mirada era anhelante y ciertamente triste. Y estaba segura que la mía no era tan diferente a la de él.

«Ustedes son los que tienen la decisión de perdonarse y regresar. Tu la tienes, nadie mas.»

Las palabras de Chocho vinieron como un rayo a mi.

Ladeo la cabeza pensando, si debería ir o no ha donde él. 

Mientras lo hago, miro sorprendida como él se iba acercando a mi.