"Oye Jungkook"

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Salimos de la limosina, había un largo camino de alfombra roja, desde la calle hasta la entrada de la preparatoria. Caminamos y tomó mi mano,sonreí ante su acción.

Entramos y el sonido de la música sonaba cada vez más fuerte. Los pasillos estaban con una que otra persona con su pareja o pequeños grupos de amigos, al llegar al gimnasio, vimos todo.

Todo estaba genial hasta que un jalón de parte de Tae,hizo que lo mirara.

- ¿bailamos?- pregúnta tomándome de la cintura.

Asentí emocionado, jamas había bailado y si hacia el ridiculo poco me importaba.

Ya estando en el centro, tomó de mi cintura y yo mantuve mis manos en sus hombros.

Me miro y sentí como se enrojecía mi rostro.

- No me mires así.- digo apenado.

-¿así como?

-Pues así no se.

-Como no mirarte si eres precioso.

Reí nervioso y me le acerqué a su oído.

-Te quiero.- senti como se tensó,sople en su cuello dejando un beso.

-No hagas eso.

-¿Que? ¿Esto?- repetí la acción.

-Maldición si, eso.

-¿Por que?

- No querrás saber las consecuencias de tus actos.- dice apretándome la cintura. (pobre cintura ya está toda maltratada)

- Tal vez si quiero saberlas..-digo divertido.

Su cuerpo se tensó y me atrajo a el para besarme. No sabía la razón por las palabras que dije, yo no soy así, pero por lo que veía, a Tae le encantaba.

- Tae gusta jugar con fuego.¿No?- dice mirándome con su labio entre sus dientes.

- Puede ser.

- Me gustas demasiado y mas así.

-¿Así?

-Si tu cambio de actitud, estás entrando en confianza. Eso me gusta, aparte de que te ves jodidamente bien.

Mi rostro no tardo en calentarse y ponerse rojo.

Maldición,¿por que es así?

[....]

La gran pareja se veían fijamente y en eso iba entrando lisa,rápidamente su mirada se encontró con la pareja que bailaba en el centro, como si nadie estuviese en su alrededor, disfrutando su noche. Lisa sonrió orgullosa de ella, pero poco a poco se desvaneció al pensar que se iban a ir dentro de cuatro días a otra ciudad. Sus padres habían ganado la custodia total de Jungkook, que para ellos, tendrían que empezar de nuevo en otra ciudad apenas siendo la graduación y apenas les entregarán su certificado a kook y a ella se irían. Aún sin importar la custodia, no importaba ya que dentro de un año más, Jungkook podría ser independiente y regresar. Pero no podía, no podía dejar todo un año a su Tae. Porque el no puede vivir sin Jungkook. Y Tae estaba dispuesto a hacer cualquier cosa para no dejarlo ir.

Lisa hizo a un lado su negatividad y le prestó atención a su acompañante, Hoseok.

Era más mínima importancia que los dos pares de jóvenes con su pareja le daban a su alrededor. Eran solamente ellos, disfrutando la noche, como si fuera la última, aferrándose cada vez más a su amor. Su verdadero amor se encontraba ahí. Deseando que esa noche jamás acabara.

Pero lo bueno nunca dura.