**Jessie**
Estábamos ahí, yo no sabía que tema tocar, y, supongo que él tampoco, o, solo me había usado para poder salir de ahí. Nunca fui buena para entablar conversaciones pero este chico tampoco estaba expresando mucho interés, desde que habíamos llegado al parque, que había estado metido en su teléfono, haciendo quien sabe que. Desvié a mirada hacia unos metros más allá y había una pareja, al parecer habían peleado porque la chica seguía caminando mientras el trataba de detenerla, finalmente la puso frente a él y la beso, sonreí al ver aquella escena.
-Jessie -
-Si?- voltee para mirarlo
-como haces para salir del mundo de tu padre? -me quede pesando un rato, la pregunta me había sorprendido bastante, porque ahora que lo pensaba bien, nunca había escapado siempre había dejado que ese mundo se metiera en mi camino, ya que siempre terminaba rindiéndome con mi padre.
- amm bueno, ahora que lo pienso, nunca he escapado, pero sueño con el día de hacerlo, por qué?-me sonrió
- no, es que, por lo que me di cuenta, no te gusta, entonces, ¿por qué dejas que tu padre te ponga siempre tema entremedio, cómo haces para soportarlo?- le sonreí y fije mi mirada adelante
- la verdad ni yo sé, aun no sé porque no me he escapado de la casa - dije riendo suavemente
- lo harías? -lo mire de inmediato, el se veía sorprendido
- sí, si esa fuera la única opción de salir o de escapar de mi padre un minuto, si, si lo haría, no lo dudaría ni un segundo- se quedo mirándome por un rato luego corrió la mirada hacia al frente
- por cierto, Ashton, Ashton Irwin- me extendió la mano, la recibí junto con una sonrisa
- vamos, creo que ya es tarde-me dijo parándose de la banca
Al llegar la casa papá nos dijo que nos fuéramos, me despedí de todos, incluyendo al chico y le di las gracias por la charla, aunque no haya sido la gran cosa, me ayudo a salir de ahí.
-Jessie espera, ven acá tengo que hablar contigo-dijo mi papá deteniéndome cuando comenzaba a subir las escaleras y señalando su escritorio
- claro - dije entrando a su escritorio y el cerró la "cortina", la cual la separaba como una sala más de la casa
-paso algo malo? - ay no, veía su cara de regaño venir
- me puedes explicar que fue lo que paso hoy en la cena donde Richard? -lo mire confundida no pensé que se enojaría
- no, no sé a que te refieres papá- él se sirvió un poco de licor en su vaso
- oh enserio?, y desde cuando te gusta la cantar eh??- ahora sí, si sigue me enojaré y no me haré responsable de lo que pueda hacer
- sabes que siempre me ha gustado la música papá -dije asustada por lo que me podía decir
- sabias lo importante que era esa cena para mi Jessie - repitió luego de tomar de su vaso
- solo respondí a lo que me preguntaron-le respondí
- necesito a ese cliente Jessie y a ti se te ocurre jugar a la niña soñadora con eso, a ver ¿qué sacas eh?, ¿era una venganza acaso? -me dijo paseándose por la habitación
- ¿de que hablas papá? venganza de que, por favor- estaba molestándome
- claro, porque no te dejé salir con tus amigos, tu atacas contra mi negocio- me quedé callada
- además que es todo eso de que te gusta cantar, por favor- dejó su vaso encima del mesón
- sabes que, ha sido una pesada y larga noche no estoy para que me regañes por algo que no hice- estaba dándome la vuelta para ir a mi habitación pero me detuvo
- no he terminado, no te atrevas a salir de aquí- dijo enojado
- papá, siempre me ha gustado la música y lo sabes, casi me tuve que arrodillar para pedirte que me metieras a clases de música y eso lo sabes muy bien, el Sr. me pregunto si me gustaba la música y el teatro y que pretendías?, que le mintiera por tu estúpido negocio?-respondí enojada
- también es tu negocio Jessie -me dijo
- por supuesto que no!, a mí nunca me ha gustado todo esto, ah ahora si sé cuanto te importo-
- eso no es cierto Jessie, tú y tu madre son lo más importante en mi vida-
- ay por favor!, dime una sola cosa que sepas sobre mi aparte de que me gusta la música -se quedó mirándome sorprendido nunca me había enojado así en frente de él
- ves a lo que me refiero?, no te interesa nada más que el dinero en las personas, si soy lo más importante en tu vida, si te interesas tanto por mi porque no sabes qué cosas me gustan, que cosas prefiero antes que el estúpido y egoísta negocio familiar -dije elevando el tono
- ya basta Jessie! no te permito que hables así de un asunto familiar, porque todos, tú, tu mamá, están involucrados en esto -dijo enojado
- desde hace mucho tiempo que o ya no formo parte de esta familia papá, o si no dime, cuando fue la última vez que no peleamos ah?, la última vez que hicimos algo que no sea firmar cosas o ir a cenas de negocios, tus estúpidos negocios me consumieron la vida papá, pero sabes qué?, ya tengo 17 años y ya se lo que es estar encerrada por mucho tiempo en algo de lo que no me siento parte, basta, basta de obligarme a ser alguien quien no quiero ser, y si tengo que ser alguien quien no quiero ser para ser tu hija, prefiero no serlo -en eso mi mamá entró a tratar de calmar el ambiente un poco
- PREFERIRIA MIL VECES, ESCUCHAME BIEN, MIL VECES SER HUERFANA A TENER UNA FAMILIA INTERESADA Y EGOISTA COMO ÉSTA - faltó solo terminar la frase para sentir la bofetada contra mi mejilla, estaba enojado si pero eso no justificaba que me hubiera golpeado
- Jessie, hija...- me fui antes de que se volviera a acercar a mí, las lagrimas no tardaron en aparecer, corrí mi cuarto y me encerré
Siempre desde que tenía memoria que había peleado o había contradecido a mi padre, pero nunca, NUNCA había llegado a tanto, me encerré en el baño, no podía dejar de llorar, escuchaba a mamá como tocaba la puerta y me llamaba para que le abriera, odio tanto mi vida en este momento. Que estaba haciendo, por qué tomaba mi espejo y lo hacía trisas en el suelo?, me miré el maquillaje algo corrido por mi cara, los recuerdos de lo pasado pasaban por mi mente miré mi muñeca, solo derramaste más lagrimas, que más iba a hacer!, ni me había dado cuenta cuando lo había hecho, no estaba reaccionando, Dios!, alguien!, ayúdeme. Tomé rápidamente un pedazo de venda que había en mi baño y lo amarre alrededor de mi muñeca, al parecer mamá ya había dejado de insistir. Con rabia preparé una mochila con un poco de ropa, algo de maquillaje, Dinero, me cambié los zapatos por algo más cómodo, me abrigué y solo reaccioné a llamar a una sola persona..
-Hola?-dijiste en sollozos
-Quien habla??, estas bien, quien llama a estas horas? -respondió un poco soñoliento
-necesito un favor -dijiste llorando y mirando por la venta
- Jessie?, amm dime-
-ve a buscarme a la plaza donde estuvimos hoy si? por favor, allá te explico todo -
Colgó la llamada, me habia dado un papel al despedirse, al entrar al auto descubrí que era su número, lo guarde nerviosa de que mi papá pudiera verlo o si quiera mi mamá. Abrí la ventana, estaba harta, esto terminaría hoy. Salte de la ventana, sentí como mi tobillo me gritaba que le había dolido, pero finalmente logre salir de la casa