Ocho (Secuela De Hoshigaki)

De cada nube

En julio, nos hemos vuelto cansados

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Había venido a Konoha varias veces durante el largo período de meses con sus hermanos para ayudar con las reparaciones y mostrar su apoyo como representantes de Sunagakure. Pero esta era la primera vez que venía con el título oficial de Embajador después de un entrenamiento político de seis meses, y cuando Kankuro se paró frente a las altas puertas de madera con las manos en los bolsillos y un nuevo prototipo de títere atado a la espalda, supuso que tendría tiempo suficiente para tratar de localizar a la peor guía turística que había conocido.

Nara Shikamaru lo estaba esperando en las puertas con una gacha y un bostezo cansado.

"¿Durmiendo de nuevo?" él resopló.

"Maa, más como si no tuviera suficiente", suspiró el Konoha-nin. Tomó la mano extendida del otro y la sacudió antes de que comenzaran a caminar lentamente al lado del brillante pueblo. "Por cierto, seré tu acompañante cada vez que me visites. Ya que eres el embajador oficial de Sunagakure y todo eso".

Embajador Sunagakure. Temari todavía se burló de las túnicas oficiales que el consejo le asignó y que siempre logró "perder".

Kankuro sonrió. "¿Estás seguro de que no te quedarás dormido en el trabajo?"

"Le conté a Tsunade-sama mis preocupaciones. Todo lo que me dijo fue que 'cortara mi mierda y saliera de su oficina'".

Hablaron de algunas cosas triviales en su fácil deambular por la Torre Kage, como el reciente torneo de shogi celebrado en Fang Country y el extraño cambio de CEO que una cadena de empresas asumió repentinamente desde algún momento del año pasado, como con Hisan IE, el Cerdo Fundación, o The Povi Co., solo por nombrar algunos.

En un momento de calma en su conversación, ambos disfrutando del agradable silencio, Kankuro miró los edificios y los techos de tejas rojas tan singulares al paisaje de Konoha. Parecía que la construcción iba bien con andamios y trabajadores en solo partes dispersas de la aldea en lugar de la mitad de la misma.

Y si bien se sentía culpable por dejar que el Konoha Crush llegara tan lejos, una parte de él todavía sentía curiosidad por la apatía que Sakura tenía con respecto a eso. No quería que los ciudadanos se lastimaran ni nada de eso, pero se había contentado con ver arder los incendios mientras no hubiera nadie allí para quemarlo.

Hablando de Sakura, Shikamaru probablemente la conocía, ¿verdad? Todos estaban juntos en los exámenes de Chuunin y eran parte de esos novatos. ¿Novato diez? Novato Seis. No, bueno, Novato Algún Número.

"Hola, entonces", comenzó. Shikamaru parpadeó y giró la cabeza, ligeramente curioso. "¿Conoces a Sakura? ¿El cabello rosado estaba en nuestros exámenes de Chuunin? He tenido la intención de hablar con ella sobre algo".

Entonces, Shikamaru hizo lo más extraño.

Él hizo una mueca .

"Sí ..." se estiró. "Probablemente no has escuchado". Su voz bajó un tono como si estuviera a punto de contar un secreto que no era suyo, y Kankuro inmediatamente se puso nervioso. "Se suponía que ella y el resto del equipo ocho estarían en una misión a largo plazo sin fecha de finalización exacta, pero hace unos meses fueron declarados MIA. Nadie sabe realmente los detalles, pero en este punto, todos se inclinan hacia KIA ".

"Estás bromeando".

"Es, eh, es un tema difícil para nuestro año. No éramos realmente amigos, pero ya sabes".

"Pero—"

Kankuro cerró la boca con fuerza. La última vez que hablaron fue cuando admitió que Konoha no significaba nada para ella.