Juego de Tronos: Preparado Jugador ?

Capitulo 5

¿Jugador dos? ¿Qué coño significaba eso? Las preguntas sin respuesta alguna de arremolinaban en la mente de Jon sin promesa de detenerse. Junto a un profundo malestar centrándose en su estomago con la necesidad de salir que lo obligaba a seguir concentrándose en mantener su desayuno dentro. 

"Atención se ha desbloqueado la función chat"

Con esta función podrás hablar con otros jugadores en tiempo real donde quiera que estén. ¿Desea iniciar un chat con Jugador dos?

- ¡No, no quiero hacer nada!

Él interior de Jon gruñía y rugía con una insana necesidad de salir y exclamar por el  hedor del exterior. A sus ojos todo volvió a su color junto con el sonido de cascos de aquí para allá, gritos de alarma de cada soldado. Cerro con toda la fuerza que le quedaba los ojos para concentrarse en no vomitar. 

Evento: Completado

Los bandidos son algo común en cualquier parte del mundo. Es lo más común en tiempos de paz o de hambruna. Casi siempre son hombre de avaricia insana o veteranos de guerras pasadas los que forman sus bandas. (Aviso pueden surgir anomalías durante el evento)

Recompensa: 500Exp, desbloqueo de una habilidad compatible con tus acciones, titulo "Guardián", +50 de Liderazgo y +60 de influencia con la facción menor VillaWuargo.

El malestar se mantenía firme en su interior el sabor amargo y ácido se extendía por su boca. Sus manos se cerraron con fuerza, la izquierda sobre las riendas mientras que la derecha sobre el mango de la espada, sacando crujidos. El dolor y el malestar se expandían por su ser, no sin llamar la atención de sus seguidores pues varios se acercaron para dar unas suaves palmadas en su espalda.

- Señor, vomite sin miedo. Esta mejor fuera que dentro. - La voz de un anciano resonó cerca de Jon como si fuese un murmullo del viento, suave y calmado. - Es su primera vez en una batalla es lo normal. Yo acompañe a vuestro padre en la rebelión de Roberth y de los Greyjoy y le aseguro que se tarda mucho en acostumbrarse a la sangre. 

La mente de Jon simplemente deicidio forzar el contenido de su estomago en su sitio mientras se incorporaba sobre la silla, para dejar salir lentamente el aire de sus pulmones para abrir los ojos, ahora mostrando calma o un intento de ella. Jon pudo observar a cinco jinetes a su alrededor teniendo todos la preocupación escrita en sus rostros, algo que solo había visto en los rostros de Lord Stark y de sus hermanos pequeños. La sensación de calidez por la preocupación lleno su corazón para acabar reluciendo una sonrisa y que esta se contagiase por sus subordinados casi al instante.

- Nieve eh de reconocerlo, has hecho que las llamas de la ira ardiesen en mi corazón. Si te conviertes en castellano o líder de algún ejercito o banda mercenaria dudo mucho que no consiguieses empleo. - Rodrick acabo apareciendo entre algunos soldados mientras desmontaba de su corcel siendo seguido por cinco jinetes. - Vamos busquemos si hay supervivientes que puedan dar algo más de información. - Su cabeza giro para ver a todos los jinetes restantes, que aún sin sufrir ninguna baja era clara las expresiones de remordimiento y nauseas. Estaba claro que no sería un trabajo fácil, el hedor a sangre y muerte aun era pesado. - Si alguno encuentra algo que avise de inmediato.

No tuvo respuesta, realmente no la necesitaba. Jon  pudo ver como todos, incluidos sus hombres, desmontaban y empezaban a registrar los escombros e interiores en busca de cualquier superviviente. Él acabo haciendo lo mismo, tras envainar la espada, adentrándose en una de las cabañas. Con el primer paso que dio en su interior tuvo que tapar rápidamente su boca y su nariz. El hediondo olor a podredumbre y oxido lo obligo a salir y junto a la entrada acabar vaciando el contenido de su estomago. El interior era usado como morgue por los bandidos donde almacenaron los cuerpos de todos los aldeanos que mataron, hombres y mujeres de todas las edades estaban almacenadas ahí. Apilados en una montaña de cadáveres. Jon seguía vaciando su estomago, llamando la atención de varios soldados que al ver el interior de la vivienda no quedo dios alguno al que no maldijeran.