Listen To Your Heart

CAPÍTULO 3 " Pasado "

Pov. Luhan

Las enormes puertas negras se abrieron dejando en evidencia su majestuosa residencia y para mi sorpresa era una elegante e imponente mansión, donde sus impresionantes jardines se llevaban por completo toda la atención, a los laterales de su hogar habían personas de seguridad vistiendo trajes negros, gafas oscuras y con perros grandes que caminaban junto a ellos supervisando el área.
Fue entonces ahí cuando supe de inmediato que me estaba involucrando con una persona importante, aun cuando lo sospechaba desde el momento en el que salíamos de la discoteca y el mismo hombre que nos ayudó dentro se subía a un auto negro y nos seguía hasta llegar aquí y ahora está enorme mansión confirmaba mi teoría porque no cualquiera vivía de esta manera no de una manera justa y digna.
Al bajarme de su auto, vi que Sehun le entregó las llaves a un hombre de mediana edad quien despues de hacerle una reverencia se llevo el auto, después de eso me regreso a ver, sonrio un poco y camino hacia mi tomandome de la mano entrelazado sus dedos con los míos y guiandome hasta la enorme entrada; una puerta de color marron con doble tallado dándole un perfecto acabado mediterráneo.
Cuando entramos solto mi mano para ir directo a la cocina o eso suponía mientras yo me quedaba paralisado observando con la boca abierta el enorme salón principal que tenia un techo alto y en el centro colgaba una gran lámpara de cristales, era tan elegante, tan sofisticado de colores claros mezclado con tonos oscuros que le daban un perfecto toque sensual al ambiente.
Estaba mirando todo, detallando cada objeto, cada lujosa decoración que tenía cuando lo vi salir de la cocina caminado con una bolsa de hielos en su mano derecha.
-¿Te gusta lo que vez? - Pregunto en un tono muy sensual diría yo - ¿Luhan?¿Estas escuchandomé?-.
-¡Oh!...Si si claro que si, tu casa es bonita y lo sabes, no hace falta que alguien te lo diga, supongo que debes estar acostumbrado a escucharlo de otras personas - conteste mirandolo mientras tomaba la bolsa de hielos y la colocaba en mi mano tratando de restarle importancia a lo que me decía, porque la verdad es que sería un verdadero sueño vivir en este lugar, no pude evitar imaginarme a Sehun junto a su hermosa esposa e hijos viviendo aquí, porque de seguro debe tener una.
-¿Siempre eres asi Luhan? - sonrió ligeramente - dejame ayudarte con eso precioso-.
Tomo la bolsa de hielos y empezó a aplicarlo sobre mi mano derecha haciendo ligeros movimientos para bajar la hinchazón que hasta ese momento no habia notado que tenía, con la luz perfecta pegando en su rostro no pude evitar dejar de mirarlo, quería memorizar cada detalle para así jamás olvidarlo ya que sabía perfectamente que jamás lo volvería a ver porque seguramente la mujer que vi en el club era su esposa talvez la dueña de su corazón y también la dueña de este hermoso lugar pero entonces ¿porqué me trajo aquí?, talvez lo hizo por ser caballeroso y gentil o simplemente porqué quería algo de sexo gratis, de todas formas el parecía ser esa clase de hombre que sólo buscan diversión de una noche y nada más, aun que viendolo desde varios puntos de vista un hombre de su talla jamas se fijaría en alguien tan sencillo como yo para tener una relación sería, esa clase de hombres sólo buscan un buen polvo y yo se la estaba poniendo muy fácil.
- Piensas mucho ¿Lo sabías? - Dijo acercándose hacia mí como si supiera de la pelea interna que tenia en estos momentos - Eres un niño extraño y eso debo admitir que me excita-.
Lo podía sentir tan cerca, tanto que
percibia perfectamente su agitada respiración mezclándose con la mía, su dulce y varonil aroma apoderándose de mi cordura y sus oscuros ojos clavados en los míos volviéndome completamente loco, estabamos tan cerca el uno del otro que era difícil pensar con claridad, en un movimiento totalmente impulsivo tome la iniciativa y lo bese con tal seguridad que me sorprendió, sabia que esto era incorrecto que talvez el era casado y quien sabe hasta tenía hijos pero no lo sentí así cuando el beso fue correspondido con más intensidad, tomó de mi cintura y me acerco a el aferrando su cuerpo al mio, las prendas que usábamos comenzaba a ser molestas y las caricias se hicieron presentes a medida que nos besábamos apasionadamente tanto que podia sentir perfectamente la necesidad que tenia por adueñarse de mi boca y sobre todo su miembro que comenzaba a despertar por la fricción de nuestros cuerpos, por inercia lleve mis brazos a su cuello mientras mis manos acariciaban sutilmente su suave y delicado cabello, decidimos que esto no podría terminar aquí, asi que nos dirigimos hacia una habitación; nuestros pasos eran torpes dábamos vueltas buscando el pasillo y riendo juntos como dos adolecentes mientras chocabamos con las paredes, con mis manos en su camisa tratando de quitarlo y así poderlo sentir más cerca.