Diario De Un Chico Con Dos Personalidades

Un nuevo amigo...

*Timothy Wright o cotidianamente conocido como "Masky". Sinceramente odio ese apodo.
Caminaba por el bosque, más cercano a la civilización. Aunque se encontraba más a las orillas. Una gran reja que separa el sombrío paisaje de la iluminada ciudad. Era una reja bastante grande y muy larga, dividía el lugar hasta donde la vista me llegaba. Por suerte en la mochila que cargaba traía una pinzas de cable, con el filo suficiente para atravezar el acero. Cuando pase supe que mi vida se iría a la mierda, todos darían por muerto a Masky, pues su dulce deseo de matar, había concluido.
Al adentrarme un gran escalofrío recorrió mi piel, siempre que pasa se que algo malo se acerca. Un sonido de unas hojas secas siendo pisadas se escucho a mi alrededor, no distinguía por dónde, ¿A mi derecha? ¿A mi izquierda? ¿Delante o atrás? No lo sé... Me sentía acechado. Cuando gire hacía atrás ví una vieja ventana que se asomaba entre ramas secas. Me acerque un poco más y una mansión gigante me dejó boquiabierto. Tan vieja y antigua, rodeada de musgo y un piso decorado de las respectivas hojas naranjas y amarillentas del otoño.
Intenté acercarme, pues la intriga se apoderaba de mi ser, pero de pronto escuché a alguien.*
-¡Hey! ¿A dónde crees que vas?
*Dijo una voz algo grave.*
* Me gire y ví a un chico bastante similar a mi, como de mi edad, con un rostro cansado. Estaba sentado en unos columpios oxidados.*
-¿A esa mansión?
*Dije, mientras me rascaba la nuca en forma de nerviosismo.*
- ¿Esa mansión?
*Señaló aquel chico.*
-Supongo…
*Dije de nuevo, está vez sintiéndome un poco interrogado. Aquel chico desconocido se levantó del lugar y camino hacia mi, no le veía alguna mala intención porque lo que no me demostré a la defensiva.*
-¿Eres uno de nosotros?
*Dijo con uno de impresión.*
-¿Nosotros?
*A este punto, yo ya no entendía nada, ¿a quienes se refería?. Alzo su mano levemente con la intención de llevarla hasta mi hombro para consolar, yo solo veía cada movimiento y lo veía a los ojos, claro, traía mi máscara puesta.*
-Descuida, no te dañaré. No estoy de humor para hacerlo.
*Me mostró una sonrisa muy cálida y se presentó mostrándome su mano.*
-Me llamo Maxwell, pero, mejor llámame Max
-Mask… Tim, llámame Tim.
Estreche su mano. Aquel chico desconocido ahora revelado como Max, se convirtió en mi primer amigo extraño. Un gran comienzo… por no decir, algo curioso.