Yoongi tenía a sus propios demonios acechándolo desde la oscuridad, y apenas lo dejaba dormir, por eso a las tres de la mañana estaba vagando por los pasillos de su casa.
Las palabras que le dijo a Jimin, el odio que le gritó a su hijo y las marcas que le hizo a Lisa eran actos que nunca iba a perdonarse.
Y aunque realmente se le hacía incómodo el que su hijo fuera hetero, estaba luchando contra esa parte de su mente.
No es que odiara a ese tipo de gente, él en verdad no lo hacía, o solía hacer.
Pero cuando cumplió 8 años y entendió que él sólo tenía una madre, preguntó dónde se encontraba la otra. Porque él sabía que la señora Min no era su madre biológica incluso si le había dado el apellido. Su mamá, TaeYeon, le dijo que Jessica, su verdadera madre, no había estado lista para entrar a la maternidad por lo que se había ido. Pero que ella siempre se había ocupado de darle amor por dos personas. Como todo niño quiso conocerla y fue insistente hasta que a los trece años escuchó a su mamá contándole a su nueva esposa, la señora Young, que su verdadera madre se había ido en el segundo que supo de la existencia de Yoongi y confesado que era heterosexual. Su madre no había sido más que una pantalla para su orientación sexual todo ese tiempo, luego de Yoongi, que hubiera sido un Jung en vez de Min, se había mudado a Estados Unidos y cortado todo tipo de posible conexión.
Y puede que desde entonces Yoongi les tuviera un poco de rencor a los de esa clase, pero no por eso había tenido el derecho de desquitarse con su primogénito.
Yoongi iba descalzo, para no hacer ruido, arrastrando sus pies por la alfombra. Jimin había aceptado dormir con él, solo acostarse a su lado, luego de haber visto sus ojos azules llorosos con los que se había sentado al pie de la escalera cuando Jungkook directamente se había ido a su habitación y encerrado sin haberle hablado.
Sin embargo, tener al amor de su vida durmiendo a su lado no lo ayudó a conciliar el sueño.
La habitación de Lisa estaba al lado de la principal, así que se dirigió allí primero.
La contempló un momento, su cabello estaban por todo alrededor de su cara, llevaba su pijama de flores, que estaba levantado un poco, revelando su pancita y bajo el brazo tenía al Señor Arcoíris, ese oso la acompañaba a todos lados y estaba presente en la mayoría de las fotos familiares. La sábana, como siempre, le tapaba los pies ya que la niña alegaba que desde allí los monstruos solían llevarse a sus presas.
Yoongi sonrió melancólico, por haberla extrañado tanto y se acercó a la mesita junto a su cama, encendió la lámpara que él mismo le había comprado, que llenaba la habitación con sombras de forma de golondrinas, según Yoongi cuando se la entregó a Lisa, los pájaros eran él y Jimin, sus papis, que siempre iban a estar protegiéndola cuando durmiera.
Observó las paredes un momento y luego se arrodilló a su lado, besó su cabecita y le acarició su cabello por un tiempo. Con un te amo murmurando contra su frente, siguió su camino a la habitación de su hijo.
Luego de casi una semana volvía a tener a su familia bajo su techo, bajo su cuidado, y era tan hermoso estar en la casa mientras todos dormían, se sentía como el guardián de esas tres personas qu alegraban su vida enormemente.
Pero, quizás sólo dos personas estuviera dormidas, porque mientras más se acercaba a la habitación de Jungkook más sonidos se escuchaban. Respiraciones fuertes, pero se escuchaban lejanas como si estuvieran haciendo eco en un lugar vacío.
Preocupado abrió lentamente la puerta, encontrando la cama vacía. Por debajo de la puerta del baño, la luz se filtraba, revelando donde Jungkook se encontraba.
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. ⇢ familia min ˎˊ˗ ꒰ ym
Short StoryUniverso alterno donde la homosexualidad es lo normal y la heterosexualidad es lo social y religiosamente mal visto. Donde todos los niños tienen dos padres o dos madres (no necesariamente juntos), por lo que hay embarazo entre dos personas del mism...