Una gran tormenta ilumina las calles de Estocolmo desde hace horas.
Miro al reloj de la mesilla y veo que son las tres de la madrugada.
Suspiro desesperada para posteriormente levantarme de la cama y dirigirme hacia la puerta.
Camino por los pasillos del palacio hasta que llego a las escaleras.
Una vez en el piso de abajo me dirijo hacia la cocina y comienzo a calentar un vaso de agua.
- ¿No tienes sueño Rachel? - oigo una voz a mi espalda.
Yo doy un salto y me giro.
- Me has asustado Liam - digo yo poniendo una mano sobre mí pecho.
El padre de Ethan se ríe.
- Lo siento... pensaba que era el único del palacio con insomnio - dice él mirando hacia la ventana - no acostumbro a ver a gente a estas horas por aquí, por eso, cuando he visto que estabas despierta, me he sorprendido.
Yo suspiro mientras termino de hacerme una infusión.
- Si bueno... últimamente no duermo muy bien - digo yo mirando el vaso y fingiendo una sonrisa.
Él asiente con una leve sonrisa mientras yo doy vueltas a la cucharilla que se encontraba en mi vaso.
De repente noto que una mano me acaricia el pelo con suavidad.
- No quiero entrometerme donde no me llaman pero... - dice él suspirando - Ethan ha cambiado mucho desde que llegaste.
Yo miro hacia el suelo sin saber que decir.
- Las cosas no son tan fáciles Liam - digo dejando el vaso en la mesa próxima a mí.
- No lo son, pero vosotros en vez de luchar por superar las dificultades, creáis otras - dice sentándose en una silla.
Yo suspiro.
- ¿Crees que no sé que vuelve a tener cáncer? - dice al cabo de unos minutos.
Mi corazón se para al oír eso.
- Si te preguntas cómo me he enterado... mandé a un guardia que lo siguiera hasta el hospital - dice con cara de preocupación - llevaba días muy raro, yo sabía que pasaba algo.
- Se lo has... - digo alarmada.
- No, no se lo he dicho a mi mujer - me interrumpe.
Yo suspiro frustrada.
- Dime la verdad Rachel - susurra mientras se sienta al lado mío en la mesa - ¿has vuelto por eso?
Yo contemplo el horizonte a través de la ventana.
- No lo sé... - digo al cabo de unos minutos - en realidad he vuelto por el cumpleaños de Julia pero... no sé si...
- No te quedes - dice completando mi frase.
Yo me sorprendo antes la respuesta que me da: pensaba que trataría de persuadirme para que estuviera al lado de Ethan. En el fondo lo quería.
- ¿Cómo? - pregunto frunciendo el ceño.
- Mira Rachel... eres muy buena chica, y gracias en gran parte a tí, Ethan es mucho más responsable, atento...- dice sonriendo - ha quedado atrás la imagen de mujeriego, irresponsable y narcisista.
Yo sonrío al escucharlo.
- Pero es mi hijo y estoy seguro de que no quiere tu pena - dice finalmente - nunca ha querido la de nadie.
- Lo sé - digo yo tratando de reprimir las lágrimas.
- Si decides quedarte o apoyarlo en la distancia, que sea por lo que sentís el uno por el otro - dice él mirándome a los ojos - bien sea una amistad o algo más. Pero no lo hagas por pena, porque perderás el tiempo Rachel.
Yo asiento apenada.
- No quiero hacerle daño - digo en un susurro.
- Estoy seguro que encontrás la forma de no hacerlo - dice levantándose - bueno... volveré a la cama, buenas noches Rachel.
- Buenas noches Liam - digo con tono suave.
Cuando termino de beber el té, decido volver a la cama.
Una vez que he subido las escaleras, comienzo a andar en dirección a mi cuarto, sin embargo, cuando paso por delante de la puerta de Ethan me detengo en seco.
Está entreabierta.
Me aproximo a ella y decido entrar.
Veo su silueta a un lado de la cama.
Suena egoísta, pero me aterraba pensar que su presencia en mi vida estaba en peligro. Me aterraba pensar que quizás el cáncer se lo llevara.
Suspiro y me siento en su cama para posteriormente meterme en ella.
Él se gira al notar cómo la cama se hunde.
- ¿Qué pasa? - pregunta alarmado mientras enciende la luz.
Él me mira preocupado, puesto que estaba llorando. No dice nada, simplemente se acerca, limpia mis lágrimas con las puntas de sus dedos y finalmente me abraza.
Yo me aferro a él como nunca antes. Tras unos minutos, apaga la luz y ambos nos tumbamos en la cama.
Los minutos pasan y él no se separa de mí en ningún momento. Sobre su pecho, escuchando el sonido de su respiración, me voy calmando.
- Perdón por despertarte - digo yo en un susurro.
- Has hecho bien en venir, desde que me echaste de tu habitación me siento muy solo - dice bromeando - pero veo que mis encantos te han reconquistado.
Yo río al escucharle.
- ¿Cómo eres capaz de bromear en un momento así?
- Porque lo que más odio en este mundo es verte llorar - dice para posteriormente depositar un beso en mi frente - y lo que más me gusta... verte sonreír.
Él comienza a reír.
- Solo tú eres capaz de que diga estás tonterías.
Yo sonrío.
- Me hubiera gustado conocerte de otra forma - digo yo al cabo de unos minutos.
- No digas eso, ¿tú te habrías fijado en un egocéntrico? porque yo ni de lejos en una plebeya - dice tratando de molestarme.
Yo pongo los ojos en blanco.
- Tienes razón, pero me hubiera gustado conocerte fuera de todo esto, de la realeza.
Él suspira.
- Es tú decisión querida Rachel - dice él acariciando mi pelo - ya sabes lo que siento y pienso yo.
- Sabes que pienso igual que tú, pero...- digo sin saber qué decir.
- Rachel, no entiendo cuál es el problema- dice frustrado - los obstáculos los creas tú.
- Tienes razón - digo yo mirándolo fijamente.
Él me sonríe levemente y me acaricia la mejilla.
Acercamos lentamente nuestras cabezas hasta que nuestros labios se unen.
Tras un rato nos separamos y apoyo mi cabeza sobre su pecho. Él pasa su brazo por detrás de mis hombros y me pega a él.
Poco a poco me voy quedando dormida.
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Hellooo!Siento por haber tardado tanto en actualizar ^^'.
Espero que les guste y trataré de no tardar tanto la próxima vez jeje.
Cuénteme en mi Instagram (mfl_watt) o en los comentarios que quieren que pase en el próximo capítulo. Os leeré y igual tomo alguna idea si ustedes quieren! 😏
Besitos ♥️
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Lejos de la realeza
JugendliteraturSUCUELA DE APRENDIENDO A SER PRINCESA (disponible en mi perfil) Tras un año lleno de cambios drásticos desencadenados por la muerte de sus padres, Rachel por fin ha recuperado su verdadera vida. Ahora en EEUU asiste a la universidad junto con sus am...