Everything I Wanted«F.W»

❥chapter two

capítulo 2;
¿Estas siguiéndome?

Los rayos de sol entraban por mí ventana, no, no estaba dormida. Había estado viendo películas, al fin y al cabo era sábado, no tenía nada de planes. Baje por algo de comida, percatandome de que no hubieran moros en la costa. Encontrándome con una nota.

‘Sheyla_, lleve a Zury con unas amigas. Te dejé comida en el refrigerador. Y ni creas que no me dí cuenta de que no dormiste.’

—te quiere mamá.

Rei por lo último y me dirigí al refrigerador, encontrándome con lo normal. ¿Enserio mamá? Estas bromas ya no dan risa, tomé una manzana para evitar acercarme a la cocina y fui de vuelta a mi habitación.

—¿Qué carajos haces aqui Sophia?— dije viendo a la antes mencionada recostada en mi cama. —¿Cómo entraste maldita?

—Yo también amanecí bien querida. —dijo con una gran sonrisa.

—¿Qué pasó? ¿Qué te tiene tan feliz zanahoria? —pregunte y me acosté a un lado.

—La vida es tan maravillosa— suspiro con alegría.

—Hace unas semanas dijiste que la vida era un asco. —Rei recordando el momento.

—Cuatro palabras...— hizo una breve pausa, sus ojos brillaban —Jaeden es mi novio.

—No te creo— eso explica su cara de tonta. Me siento bien por ella, se conocen de hace una semana pero se que le gustaba desde siempre.

—Y hoy saldré con sus amigos. Y quiero que vengas. —tambien explica el porqué estaba aquí. —todos son de último grado y no conozco a nadie.

Realmente no quería ir, quería estar en mi cama todo el día así que inventé una excusa.

—Saldré con Adolf más tarde.

—¿El nuevo? ¿Le hablas? Es un lindo, digo no tanto como Jaeden, pero es lindo. Que venga.

«Rayos»

—Bien— dije sin aliento. —Nos vemos.

Había metido a Adolf en un pequeño problemita, vivía a unas cuantas casas de mi casa, así que la pelirroja lo vió desde la ventana, comenzó a gritarle y enseguida fue hacia el cayendo por la ventana. Baje rápidamente a ayudarla.

—¡Ay Sophia!— Levante a la de cabello corto. —Estas loca.

El castaño corrió rápidamente hacia nosotras, y la pelirroja se levantó como si nada.

—Hola, ¿Adolf? ___ me a hablado mucho de tí —esta chica enserio sabe sacarme de mis casillas —¿No importa si te robo a Sheyla por hoy? Digo también estás invitado para no dejarte sin planes.

El chico me miró confundido y le hize señas para que le siguiera la corriente.
Al parecer soy mala para esto porque el antes mencionado hizo todo lo contrario.

—¡Claro! Me encantaría, Shey Shey el helado tendrá que esperar.

—¿Shey Shey? Bien, dicho esto, paso por ustedes en unas horas. —dijo la pelirroja y se fue sin más, dando pequeños saltos cual conejo.