Después de un accidente en el Olimpo, Zeus decide castigarlos y mandarlos al mundo mortal a vivir sin ninguno de sus poderes y obligados a aprender a convivir entre ellos. Pero lo que ellos no esperaban, era que se iban a conocer tanto que llegarían...
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—¿Ofiuco? —Dijeron sorprendidos los demás signos.
—El mismo —Dijo Ofiuco con una sonrisa.
—¿Cómo es que sigues vivo? —Preguntó Géminis.
—Hablé con Zeus meses después de que me desterrara, hice una apuesta con el y gané. Mi premio era la inmortalidad —Dijo este de manera relajada.
—¡No te veo desde hace siglos! —Dijo Piscis para luego abrazarlo.
—¿Cómo conseguiste todo esto? —Preguntó curioso Aries.
—Verán... Hice esta mansión hace siglos, después de que Zeus me desterró del Olimpo y eliminó por completo el treceavo signo zodiacal. Y lo hice pensando en ustedes también para el día en que Zeus se aburriera de ustedes y los desterraran como a mí —Dijo fríamente Ofiuco mirando a cada signo fijamente.
—¿Él se deshizo de nosotros? —Exclamó preocupada Cáncer.
—Claro que no, Cáncer. Gracias por aquel detalle, Ofiuco, pero por ahora, simplemente tenemos un castigo, y al cumplirlo, podremos volver —Comentó Capricornio mientras intentaba calmar a la pequeña Cáncer.
—¡Así es, pronto podremos volver! —Dijo casi gritando Aries.
—Empiezo a creer que eso es imposible —Dijo Tauro irritado.
—Oh, ya veo... —Dijo Ofiuco— Bien, pueden entrar, les tengo que mostrar la habitación que hice para ustedes... Espero que sus gustos sigan siendo los mismo, porque si no, creo que habrá muchas cosas por retirar de su cuarto...
—Cualquier cosa que no quieran, me la dan a mi por favor —Dijo Acuario muy feliz mientras entraba con los demás.
—Wow, el lugar es muy bonito —Dijo Piscis mientras observaba todo el lugar.
—Claro que si, ¡que lugar tan pulcro y tan ordenado! —Dijo muy feliz Virgo mientras miraba cada cosa de cerca.
—¿Acaso solo sabes pensar en eso cada que vemos algo? —Dijo fastidiado Escorpio y Virgo solo lo miró mal.
—¿Acaso nunca dejas de quejarte, Escorpio? —Dijo burlonamente Aries.
—Grrr... Tú pedazo de mie... —Escorpio no pudo terminar al ser interrumpido.
—Nada de peleas, dejen de comportarse como unos niños, por Zeus —Dijo ya muy irritado Leo.
—Mejor les enseñó sus cuartos... —Dijo Ofiuco para empezar a subir al segundo piso.
La mansión era simplemente hermosa, muy a la antigua pero a la vez muy moderna, todo era perfecto en ese lugar.
Ofiuco llevó primero al mayor de los signos a su cuarto, Aries, su puerta tenía tallado el símbolo de Aries.
—Que hermosa está la puerta —Dijo este maravillado como un niño chiquito, recibió la llave que le dio Ofiuco y entró. Los demás solo pudieron escuchar un grito de su parte.
