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Silencio en toda la casa.
Ya no había risas como un año atrás.
Ya no había peleas como meses atrás.
Solo silencio.

Kyungsoo había estado llorando durante dos horas unos veinte minutos antes.
Sehun y el no hablaban desde hace ya una semana.
Estuvieron discutiendo durante meses que mejor optaron por ya no dirigirse si quiera la palabra.
Te preguntaras... ¿Cuál fue el motivo de sus problemas?
Bien.
Kyungsoo creía que a Sehun le gustaba Luhan —Su ex novio—.

Era horrible.
Lo peor es que estaba lejos de estar en lo correcto, y muy dentro de él lo sabía... Pero sus celos y orgullo eran demasiado grandes para admitirlo.
Lo peor es que esto hacía que pelearán por cualquier tontería.

Sehun entró a la habitación y tomó su almohada y una cobija.

Soo lo miró confundido.

— ¿A dónde vas? - Le preguntó.
— A dormir al sofá,- Contestó. - es un poco frío, pero me trata mejor que tú.— Dijo fríamente y salió de la habitación cerrando la puerta fuertemente.

El más bajito acarició el lado donde Sehun normalmente dormía y unas lágrimas salieron.

Dolía que la cama solo fuera para dormir.
Dolía que ya no fuera el lugar donde hacían el amor constantemente y se hacían millones de promesas.

Todo lo que estaba pasando estaba terriblemente mal.
Su linda relación de cuatro años se había convertido en una tóxica en cuestión de días.
Kyungsoo ya no era feliz.
Y seguramente Sehun tampoco.
¿Entonces por qué seguían juntos?
El bajito tenía la esperanza de que todo se arreglara, porque aún había amor ahí.

Un ladrido sacó a Soo de sus pensamientos, ladrido cuyo fue de la mascota de la pareja.
Vivi.
Un Bichon frisé que la pareja adoptó cuando compraron el departamento.
El animal brincó a la cama y comenzó a lamer las lágrimas del rostro del chico.
Este sonrió y beso al perro.
Se recostó y lo mimó hasta quedarse dormido.

Por OrgulloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora