Capitulo IV: Carrera

12 1 0
                                    

Mark Turner siempre habia sido ese chico atletico, que alardeaba ser el mejor, el más rapido, el más fuerte, el de resistencia inalcanzable.
El que se alzaba en el peldaño de su clase. Y es que con solo 17 años de edad, habia sido jugador destacado del equipo de soccer de su escuela durante 3 años seguidos, desde niño sus padres y sus maestros lo vanagloriaban, era normal que su ego estuviera por las nubes.

Una noche de sabado, se hallaba con una chica que se negó a acostarse con el detras de un arbol.
Decía que solo queria pasar una noche agradable con el por que pensaba que era alguien carismastico.
Esto molesto mucho a Mark quien trato a la chica de ramera, luego de empujarla contra el suelo, la escupió y expresó lo siguiente "Las rameras se van a pie" cogió las llaves de su deportivo rojo y emprendió su camino.
Horas antes el rubio llevó a la chica a "Hoobanks" un restaurante nuevo que estaba en el otro extremo de la ciudad.
De su casá a aquel restaurante se tardaba 45 minutos en auto, por lo que se entiende que enviar a la chica a pie era un acto de lo más macabro.
Ya sea por justicia divina o el mismo Karma, el auto del rubio se detuvo en el kilometro más oscuro y solitario de aquella carretera, ya había andado 30 minutos por allí y no tardó en darse cuenta que la razón de esto se debía a no haber revisado las reservas de gasolina.
Sabía que más o menos a 5 kms había una gasolinera, decidió ir a pie a buscar un poco (despues de todo con su increible estado fisico esto no representaria nada más que un calentamiento, pensó)
Comenzo a caminar, mientras taradeaba una fea cancion de pop.
Su expresion cambió a la de desconcierto cuando escucho que justo detras de el alguien silbó la misma melodia... lo primero que penso fue que de alguna forma la chica lo habia seguido, pero cuando dió la vuelta no encontro a nadie.
La preocupacion invadió todo su cuerpo, y empezo a caminar más rapido, podía jurar que alguien le respiraba en su nuca, pero cada que se volteaba no veia nada. Empezo entonces a correr, y aquel respiro que le atormentaba se convirtió en un gruñido.
Habia corrido por una hora, el cansancio invadia su cuerpo y sin embargo no llegaba a su destino.
Cuando se detuvo a tomar aliento, justo enfrente de el, a sus pies, cayó lo que el por un momento pensó se trataba de 2 pedazos de carne, par calmar su alma y su espiritu, quizo creee que se trataba de alguna broma.
Más temprano que tarde detalló mejor que se trataban de 2 piernas cercenadas, y antes de poder razonar una respuesta logica, alguien lentamente pusó una mano en su hombro izquierdo, y sobre el derecho acerco lentamente un objeto que escurria un liquido carmesí...
El horror invadió su ser cuando se dió cuenta que de trataba de aquella chica a la que kilometros atras dejo en el suelo, era su cabeza, y la manos que sostenia su hombro, negra como la noche, apenas se podia diferenciar de la sombra, parecia como si aquella cabeza levitara.
Una voz siniestra emergio de la figura que lo acosaba, la voz decía que quería jugar, las normas, sencillas.
"Correr hasta a casa llegar" si se detenía antes de esto tendría un destino peor que aquella chica, si miraba hacia atras, perdería sus ojos, y si lo alcanzaba cortaria sus piernas.
El rubio comenzo a correr, corrió por minutos, sin parar, su ritmo era cada vez más debil, pero sabía que detenerse significaba morir. El terror lo invadia, con las pocas fuerzas que aun le quedaban pedia ayuda, nadie pasaba por esa carretera, se dió un poco de animo al pensar que era un atleta nato, y que esa noche no iba a morir, sabía que si esforzaba su cuerpo al maximo llegaría a su casá, esas eran las normas no? "Si llego a mi casa el juego habrá terminado y habré ganadó" pensó.
No quizo pensar en si se trataba de un psicopata o algo más, el estaba empeñado en llegar.
Pasadas las horas y con el amanecer avecinandose, logró ver luces a lo lejos, y entendió que estaba llegando al final de el casi infinito tramo, el animo y la moral invadió su cuerpo, su ritmo nuevamente se alzo, sabía que cuando llegará se apoyaria en alguna persona que viera y le pediria a esta que lo llevase a su casá.
Pero tan horrible fue su sorpresa, su amarga sorpresa... al darse cuenta que las luces de este sitio iluminaban un cartel.
El chico intentaba entender como era posible, intentaba e intentaba comprender, pero le era imposible, lagrimas salian de sus ojos, el chico se detuvo, se tendió en el suelo, y luego de un grito desesperado, aquel cartel que tintilaba y formaba la frase "Bienvenido a Hobastank" se teñia de rojo, y poco a poco el grito se ahogó en un silencio.
-------------------------------------------------------------
Sherift... hay 3 nuevos reportes de personas desaparecidas, se trata de los hermanos Casttle, y un chico residente de la escuela de Rua.
Recien empieza el mes de abril y ya tenemos 8 desaparecidos.

Que Dios nos ampare.

RuaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora