Blanco y Negro

A tu lado

- Ya despertaste?!- dice Sakura- Como te sientes?.
- Muy adolorido, pero gracias a ti estoy vivo-Responde Sasuke y sonríe.
- Q fué lo que pasó? Porqué estás así? Quien te hizo esto?.- Preguntaba Sakura.
- Espera, una pregunta a la vez. Te lo contaré todo - dijo Sasuke.
- Yo era soldado en el ejército, mi hermano Uchiha Itachi y yo nos encargamos de infirtrarnos en guaridas de terroristas. En una misión mi hermano pisó una mina y me pidió que escapará pq llegarían refuerzos enemigos, y él ya no podía irse pues si levantaba el pie ocurriría una explosión y moririamos los dos, cuando salí del lugar la mina explotó y así fué como murió, protegiéndome.

A Sasuke se le quebraba la voz.

- Después de eso ya no pude estar activo en el ejército, mi salud mental no me lo permitía. Un día un amigo mío q había sido capitán en el ejército, me ofrece un trabajo de... bueno puedes llamarlo espía. Consiste en buscar pruebas de delitos cuando la policía no puede lograrlo, el trabajo sucio, a veces tengo q infirtrarme entre los delincuentes. Cuando me viste en el club, estaba en una misión... Me dolió mucho herirte de esa forma, pero era lo único q podía hacer en ese momento para no involucrarte, pues estarías en grave peligro.
- Está bien, ya entiendo- dice Sakura mientras recordaba esa noche, las lágrimas empezaban a mojar sus ojos.- Lamento mucho la forma en la que murió tu hermano- añadió.
Sasuke acarició su rostro.
- Me dolió mucho ignorante esa noche, después vine aquí para explicarte pq lo había hecho, pero tú no me dejaste entrar- sonríe apenado.
- Lo siento en verdad, estaba muy dolida, pensé lo peor de ti, pero ahora q lo se todo comprendo q fué lo único q podías hacer.

Sasuke suspira aliviado, de repente siente un dolor fuerte en el hombro. Sakura se da cuenta.
- El efecto de la anestesia está pasando, te aplicaré otro analgésico para el dolor, pero primero tienes q hacer un esfuerzo y subir a la cama, no puedes permanecer aquí en el suelo.
Sasuke asiente y trata de incorporarse pero las heridas le dolían demaciado.
- Espera te ayudaré- dice Sakura mientras lo toma del brazo.
- Aaaghh!!- se queja el del dolor.
- Lo siento, solo un poco más.
Ya en la cama Sakura le aplica el anestésico.
- Esto te dará sueño, pero es mejor q descanses ahora, después podemos seguir hablando si quieres- le dice ella con una sonrisa.
Sasuke aunque adolorido se sentía tan tranquilo, había añorado tanto estar a su lado que sus heridas físicas no le importaban.
- Quédate conmigo hasta q me duerma- le pide.
- Está bien- dice ella sonriendo con ternura y se acuesta con mucho cuidado a su lado para no lastimarlo.
El la miraba sonreír mientras el sueño se iba apoderando de él, ella acariciaba su cabello quitándolo de su frente, podía ver sus cejas. Sasuke aunque quería seguir mirandola no resistió el cansancio y se durmió.

Sakura se levanta cuando lo ve bien dormido, recoge el edredón del piso q estaba manchado y cuando se dirigía al cuarto de lavado ve en el pasillo una camino de sangre desde la puerta hasta su habitación, se sobrecoge, pero continua con su tarea, limpia la sangre, de la casa y la del exterior de la puerta que Sasuke había dejado al apoyarse y que por suerte ningún vecino del edificio había visto.
Después busca la ropa q le había quitado, revisa los bolsillos, encuentra un móvil,una billetera y la cadenita que él le había regalado, la cual ella arrojó después cuando lo vió en el club con otra mujer. Para su sorpresa la había arreglado. Sonríe y se la coloca en el cuello.
Arroja la ropa a la basura y pensando q Sasuke no tendría que ponerse, decide salir de compras y de paso buscaba comestible para los dos.

Regresa a las dos horas, Sasuke aún no había despertado, deja las bolsas de la ropa que había comprado para él en el sofá y se dirige a la cocina con los comestibles.
Había pensado hacer un caldo de pollo, pues no debía comer nada pesado, después de poner todos los ingredientes en la olla siente q vibra el teléfono de Sasuke, el cual había dejado en la barra de la cocina.
Lo piensa un segundo, y toma la llamada.
- Sasuke dónde estás? estoy súper preocupado, que pasó con la misión?- pregunta una voz de hombre.
- Disculpa pero yo no soy Sasuke- responde Sakura temerosa.
- Quién eres y qué haces con su teléfono?- dice la voz algo molesta.
- Soy Haruno Sakura, Sasuke... bueno el y yo...- se detiene, nunca había pensado en cual era la relación q ella tenía con el.
- Ya sé quién eres!, Perdona que me haya exaltado. Qué pasó con Sasuke?
- El llegó herido hace unas diez horas a mi casa, pero ya está fuera de peligro aunque sus heridas eran bastante graves- responde ella sin saber si había hecho bien y preguntándose por qué el hombre del teléfono sabía quién era ella.
- Herido!!??, Voy para allá...
- Espera!! El está dormido ahora y como te dije fuera de peligro, es mejor dejarlo descansar.
- Está bien, cuándo podría ir ?- pregunta.
- En la tarde de hoy estará bien, te doy la dirección?
- No, llegaré no te preocupes, y Sakura...cuida a ese tonto por mi- cuelga.
Sakura se había olvidado preguntar quién era, pero su voz le inspiraba confianza. Estando el caldo ya listo se dispone a guardar la ropa de Sasuke en el armario. Deja afuera una camiseta blanca,un pantalón de chándal gris y unos bóxer también grises.
En ese momento Sasuke despierta.
-Sakura?- llama.
- Estoy aquí- dice mientras sale del baño, donde había dejado la ropa- como te sientes?
- Un poco más descansado, pero adolorido aún.
- Es normal, tus heridas son grandes, puedo preguntar cómo te las hiciste?
- Me tendieron una trampa, y me atacaron unos matones del jefe mafioso q estaba investigando, ese q estaba sentado conmigo en el club.
- O por Dios, es una suerte q ellas salido vivo!- exclama Sakura llevándose las manos al pecho, acto seguido se sienta en la cama junto a él.
- No te preocupes he pasado peores!- le dice el sonriendo.
- No lo puedo envitar, cuando una persona a la que amas sale herido es natural preocuparse.
- Que dijiste?- pregunta Sasuke.
- Que es natural preocuparse?!- le responde ella.
- No,no, lo otro.
- Que...- Sakura se queda helada, al darse cuenta de lo que había dicho- Te he preparado el baño- dice nerviosa cambiando de tema.
- Lo escuché, no quieras ocultarlo, pero está bien, ya haré q lo digas de nuevo.