El diario de un corazón roto (boyxboy)

Capitulo 1: Mi mejor amigo Kiseop

(POV Kevin)

   Hace un año que he comenzado a vivir con él, con Lee Kiseop. Él es mi mejor amigo, bueno, nos contamos todo y pasamos muchos bonitos ratos juntos pero lo que él no sabe es que desde que lo conocí quede perdidamente enamorado de el. Lo conocí cuando comencé la universidad, la verdad no estudiamos lo mismo ya que yo estudio Licenciatura en Letras y él estudia medicina pero durante el año de ingreso tuvimos varias materias en común y ahí nos hicimos cercanos. Él siempre me vio como un hermanito por eso me tiene tanto cariño, y me invitó a vivir con él ya que yo no tengo familia en Seúl y apenas tenía dinero para alquilar una habitación donde sólo dormía. La verdad al comienzo no sabía si solo estaba confundido ya que nunca me había fijado en un hombre, pero confirmé mis sentimientos cuando el me dio mi primer beso.

<<Flash Back>>

Era otro día que pasaba junto a él , un día más, con la diferencia que hoy por alguna razón tenía mucha fiebre. Quizás sea porque pesqué un resfriado ya que han sido días de mucho frío y yo siempre enfermo con facilidad.

Kiseop me cuidó todo el día, hoy tenía una especie de cita con Eli pero tuve que suspenderla, bueno... Kiseop se encargó de ello. Y él, pues yo tenía entendido que tenía una salida con su "amiguito".

-¿Seoppie? -me atreví a murmurar cuando el terminó de realizar la llamada.

- ¿Si? -se volteó mirándome con esa hermosa sonrisa que el solo poseía. Era realmente atractivo de todos los perfiles.

-Muchas gracias por hablar con Eli por mi... yo... realmente no me hubiese atrevido... -murmure sonrojado, jugando con mis manitos. Él se acercó a mí tomándome de las mejillas y me las acarició con ternura.

-No me lo agradezcas bebé, sabes que por ti hago cualquier cosa. Ahora anda, vamos a la cama para que descanses, ya cenaste asique debes dormir..

-Pero es muy temprano aún... -susurre haciendo puchero, pero él me tomó en brazos como princesa y me cargó hasta la cama donde me acostó y me arropo.- ¿Te vas? -cuestione curioso temiendo a su respuesta.

Aunque la habitación estaba oscura pude ver su expresión preocupada, se lo estaba pensando definitivamente, y luego de tantos incómodos minutos el suspiró y negó con la cabeza sonriendome con dulzura. Yo me encogi incómodo y me cubri bien con las colchas ocultando mi puchero.

-Si tienes que irte vete, yo me quedaré en la cama, prometo portarme bien.. -susurre bajito.

-¿Hablas enserio? -me miró serio y eso me asustó un poco así que solo asenti.- Kevin.. ¿crees que te dejaría solo cuando vuelas de fiebre? -Ahí no supe que responder, solo deje mi mirada clavada en la ajena. El no dijo más y se acostó a mi lado; yo realmente me sentía muy mal, temblaba de frío y al parecer el pudo notar aquello. Porque en un abrir y cerrar de ojos me encontré envuelto en sus brazos.- Kevin..

-¿Qué?

-Creo que tienes... los labios algo morados ¿Ti..tienes frío?

-Un poquito.. -Susurre en un tonito suave e infantil.

- Aah... ya veo -Susurró y quedé helado al sentir su cálido aliento chocar con mis labios, ¿a caso estaba delirando? No, claro que no. Y me tense por la sorpresa de sentir sus carnosidades sobre las mías. Mi corazón se agitó como nunca, no me lo podía creer, las mariposas en mi estómago se pusieron inquietas. Pero mucho no me duró mi dulce sueño ya que pronto el se separo, y pude oír su vaga risita al notar que yo aún no reaccionaba, había quedado duro como roca y rojo hasta no más poder.- Buenas noches, bonito...

Y ahí quedó todo ya que yo no tardé en dormirme y él hizo lo mismo.

<<Fin del Flash Back>>

Salí de la clase y con la primera persona que me crucé fue con Eli, o mejor dicho Kim Ellison pero yo prefería llamarle Eli ya que sonaba más bonito. A él, sin embargo lo conocí fuera de la universidad, pero fue en el mismo año en que conocí a Kiseop. Mi primer encuentro con Eli fue en el aeropuerto justo cuando yo acababa de llegar a Corea, por lo torpe que soy había chocado con él y me había lastimado un poco el tobillo por lo que él muy amable me llevó en su auto al hospital para que me revisarán. Luego de eso me lo volví a cruzar un par de veces en la calle, siempre por mis accidentes torpes. Y así por último nos vimos en la misma universidad estudiando lo mismo, el dice que es el destino pero yo digo que es coincidencia. Desde que lo conocí el siempre ha sido muy lindo conmigo, siempre me trata tan bien y Kiseop receloso dice que le gusto pero yo no lo veo así, yo creo que solo me quiere a pesar de que siempre me quiere invitar a salir y cosas así, además muy bien recuerdo lo heterosexual que es Eli aún que ahora que me lo planteo nunca he visto a Kiseop con una chica ni nada... bueno... hasta ahora que anda viéndose con su amiguito SungJae.

- Buenas tardes, muñeco -Me saludó sonriendo, pasando su dedo índice por mi mejilla con delicadeza haciéndome estremecer un poquito.

-Buenas Tardes Eliiiiiii~ -le respondí risueño y me acerqué a él dándole un pequeño abrazo aunque no duro mucho que digamos. Él paso uno de sus brazos por mi cintura y de esa manera comenzamos a caminar, la verdad yo no le veía lo malo a eso.

Comenzamos con una plática monótona, hasta que tocó el tema de Kiseop y aquel chico, la verdad no me lo esperaba que hable de ello y más me sorprendían sus palabras que no me lo quería creer, no quería oír más o muy sabía que terminaría lloriqueando y no quería que sepa que me gustaba Kiseop, un hombre.

-Yo... aah.. Eli te habrás confundido, Kiseop no es así...

- ¿A no? Pues entonces miralo tu mismo muñeco.. -Y tomó de mi barbilla obligándome a ver la puerta del salón de donde Kiseop salía y ahí estaba él y su amiguito. Sungjae contra la pared y Kiseop frente a él muy pegados, como si le estuviese coqueteando y por la reacción del otro chico al parecer así era. Se veían tan bien juntos y tan felices... que eso mismo me dolió. Fue un dolor horrible e inexplicable ¿a caso por él llegaba tarde a casa? ¿por él se iba casi todos los días y me dejaba solito? menos el día en que enferme, claro. Yo sabía que en base al beso de aquella vez no debía hacerme ilusiones pero me las hice todas, y lo peor, lo más vergonzoso fue que mis ojos no tardaron en inundarse de lágrimas. Cruzamos miradas, pude notar que el no esperaba verme por la expresión de su cara, y pese a las lágrimas que comenzaron a brotar de mis ojos me libere del agarre de Eli huyendo de ahí lo más pronto posible.