One shots BL Katekyo Hitman Reborn

Lo Que Necesito 1827

El décimo jefe de Vongola ocupando el puesto como es debido ya desde hace unos años, tenía que asignar una misión muy importante a uno de sus guardianes, estimaba que duraría un par de semanas, tal vez meses, pero tenía que hacerse y ya tenía a la persona indicada para dicha misión.

La puerta de su oficina fue golpeada dos veces.

—Adelante— dijo el jefe sin despegar la vista de sus papeles, ya se imaginaba quien podría ser.

—Décimo, he llamado a Hibari tal y como me lo pidió— dijo su mano derecha entrando a la oficina seguido del guardian de la nube quien no dijo mucho.

—Gracias, Hayato, puedes retirarte— con el tiempo ya tenía confianza para llamar a sus guardianes por su nombre.

—Me imagino que tienes una nueva misión para mi—habló por fin Hibari en cuanto el guardián de la tormenta se fue

—Asi es, Kyoya, esta misión es muy importante y tu eres el mas adecuado para cumplirla.

Estuvieron un buen rato discutiendo los detalles de la misión, sin embargo Tsunayoshi temía que su guardian no regresara, claro que sabía que el era fuerte y siempre que los enviaba a una misión se preocupaba por cada miembro de su familia, pero con Kyoya el sentimiento era más especial, sabía claramente que era, pero se negaba a aceptarlo.
Después de discutir todos los detalles, Kyoya iba a salir de la oficina para prepararse para irse lo antes posible.

—Si eso es todo, debo irme

—Espera Kyoya—dijo mientras se levantaba de su escritorio y caminaba hacia el, lo pensó dos veces, pero al final lo hizo, abrazó a su guardián de la nube.

—Prometeme que vas a volver sano y salvo.

Hibari se sorprendio por un momento, tal vez por el tiempo que duraba la misión, Tsunayoshi se había preocupado, pero por alguna razón no lo apartó, tampoco le correspondio.

—Hmpf ¿Subestimas mis habilidades? Volveré antes de lo que esperas, no te preocupes.

¿De donde le habían salido esas palabras? No lo sabía, pero sólo con Tsunayoshi podía abrirse así, era muy extraño, cuando lo conoció era un inútil, pero conforme vivió aventuras a su lado y pasaron los años se fue ganando su respeto, el no era para nada débil y eso le gustaba.
Durante el tiempo que estuvieran separados ambos descubririan lo que sentían el uno por el otro.

Después de esa despedida, Hibari se fue por la mañana a cumplir esa misión.
Los días pasaban como siempre, Tsuna en su oficina la mayor parte del tiempo, además de que no había día en el que no pensara en el, estaba distraído y esto fue notado por algunos en la familia.

Tsuna suspiro por décima vez ese día, ya habían pasado dos semanas, durante ese tiempo se dio cuenta de sus verdaderos sentimientos hacia Hibari, bueno ya los sabía, pero ahora sí los admitía, ya lo había decidido, cuando llegara se le iba a confesar, no importaba si lo rechazaba.
Por su parte Hibari habia concluido su misión, con total éxito, claro que no pudo regresar del todo sano, ya casi llegaba a la mansión, iba lo más rápido que podía, durante esos días se dio cuenta que lo que sentía por el cielo de Vongola era más que respeto, todos los días desde que lo abrazó antes de irse pensaba en él de la manera más tierna que le era posible, tenía que hacerle entender que no lo cedería a nadie, es decir, le pediría ser su pareja.
Esa misma tarde Tsuna como siempre en su oficina, su intuición quería decirle algo, algo estaba por pasar, estaban atacando la mansión, salió de su oficina y sus guardianes ya se estaban encargando, el también defendería la mansión, estaba peleando con el jefe muy parejo, había logrado esquivar todos sus golpes, pero en la entrada de la mansión pudo ver a su guardián de la nube, había regresado, pero se veía herido, eso lo hizo bajar la guardia y fue herido también, pero eso no era nada, con su siguiente ataque terminó con el y los echaron a todos.
Tsuna va lo mas rápido que sus piernas se lo permiten hacia Hibari y sin importar quien los vea o como reaccione va con toda la intención de abrazarlo, pero el guardián de la nube tenía otro plan, cuando por fin llega a él, Kyoya toma el rostro de Tsunayoshi con sus manos y lo besa, Tsuna sorprendido no tarda mucho en corresponder el beso.
Algunos los miran sorprendidos, después de salir del shock deciden dejarlos solos, ahora son sólo ellos en la entrada de la mansión, se dejan de besar y se ven directo a los ojos.

—Kyoya, cumpliste tu promesa, me alegra que hayas llegado completo, estaba tan preocupado por ti, porque yo...

Decía Tsunayoshi, más Hibari no lo dejó continuar, lo calló con otro beso.

—Tsunayoshi, la verdad no estaba completo, durante estos días había algo que me faltaba, pero ahora que estoy aquí ya lo tengo, te amo, tu eras lo que necesitaba, por favor se mio.

El castaño estaba sorprendido, pero definitivamente no iba a negarse.

—Yo también te amo, si quiero ser tu novio— dijo con una risita, colocó sus brazos detrás de su cuello y lo besó ahora el.

Luego de ese beso, la reciente pareja se percató de las heridas del otro, fueron a la enfermería de la mansión y ahí las enfermeras los curaron.

Después de no verse por un tiempo ambos se dieron cuenta de algo que no sabían que les faltaba hasta que no lo tenían y finalmente lo encontraron, este era el nacimiento de un nuevo amor.

Fin