Cada estudiante que solicitaba el ingreso al ejército real a través del reclutamiento oficial, venía de la Academia de Magia. Recibía entrenamiento durante unos dos meses y entonces era asignado a una de las diferentes fuerzas.
El ejército de Tristain se dividía en tres ramas.
Primero, el “Ejército Real”, que estaba directamente bajo el mando de la actual Reina. Los generales y oficiales eran nobles pertenecientes a la monarquía que dirigían a sus propios mercenarios con su dinero.
Los estudiantes como Guiche eran oficiales que principalmente se asignaban a este ejército real o, como más tarde se menciona, a la Armada del Cielo.
El siguiente es el “Ejército Nacional”, donde a los grandes nobles se les solicitaba reclutar la gente de sus territorios. Esta forma de organización también se le llamaba el “Ejército del Marqués”. Los nobles que recibieron tierras del rey estaban obligados a seguir su promesa de lealtad y organizar un ejército. Esto es lo que el Cardenal le había pedido al padre de Louise, el Duque de La Vallière, que organizara.
Como los soldados eran campesinos, el Ejército Nacional era considerablemente inferior al Ejército Real compuesto por mercenarios. No eran adecuados para las campañas, pero como el Ejército Real en sí mismo carecía en números, al final ellos también eran necesarios. Hubo muchos nobles, como el padre de Louise, el Duque de La Vallière, que se opusieron a la guerra y se negaron a contribuir con sus soldados.
También, dado que esta guerra era una campaña, la mitad del Ejército Nacional funcionaba como vagones…lo que significaba que eran utilizados como una unidad de transporte de suministros.
El último es la “Armada del Cielo”.
Es la rama del ejército que operaba las naves que flotaban en el cielo o el mar.
Con el capitán en la cima, esta rama era sin duda una versión en miniatura del sistema feudal. A continuación del capitán, que tenía la autoridad absoluta en el buque de guerra, estaban los oficiales nobles quienes dirigían a los marineros. A pesar de que eran llamados marineros, todos tenían alguna especialidad para manejar el buque. A diferencia del ejército, que estaba bien organizado siempre que tuviese el número de personas necesarias, la experiencia y la formación habitual destacaban por encima de todo.
Guiche, que había sido asignado como oficial de reserva en el Ejército Real, había llegado a las Instalaciones de Entrenamiento de Champs de Mars en la ciudad capital de Tristainia el día después de que Louise y los demás regresaran a casa.
El Regimiento de Rosha, el Regimiento de Lashene, el Regimiento de Navarre… Los colores de los regimientos se agitaban en los jardines de las mansiones de los comandantes de cada regimiento quienes estaban, hoy, reuniéndose en las Instalaciones de Entrenamiento de Champs de Mars.
Con una carta de presentación escrita a mano por un oficial de instrucción, Guiche caminó alrededor las instalaciones de entrenamiento, donde se encontraban los doce regimientos del Ejército Real, veinte mil soldados estaban allí reunidos. El grupo al que había terminado siendo asignado era el Batallón Independiente De Vineuil del Ejército Real. Nunca había oído hablar de él antes, pero Guiche estaba ansioso para su primera batalla.
Recientemente, había conocido con su padre, al Mariscal del Ejército Real.
Porque ser Mariscal es un trabajo durante el que uno está hasta el final de su vida, su padre, que se había retirado de los servicios militares, fue alguna vez un Mariscal. Su senil padre estaba muy frustrado por no poder participar en esta guerra y alentó a Guiche a ir.
“No valores la vida, pero valora tu nombre”, era lo que decía el soldado innato de su padre, enviando a Guiche fuera. Sus tres hermanos se habían ido también. Su primer hermano estaba a cargo del ejército de la familia Gramont. El segundo hermano era el capitán de las fuerzas aéreas. Su tercer hermano era un oficial del ejército real.