Capítulo 1. De Camino a la Agencia

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Killer Bean.
Era de noche todavía, yo conducía el camión de armas hacia la Agencia con un solo pensamiento en mi cabeza, destruirla. Después de matar a Dark Bean e intentar llamar sin resultado al Jefe, me quedó claro lo que sucedía, ahora yo era el blanco.

Miré el camino, aún faltaba demasiado por recorrer. Era de noche y se estaba haciendo tarde, pensé en estacionarme y dormir en el carro o en algún hotel cercano, pero podrían venir a buscarme y matarme mientras duerma, por lo que intenté mantenerme despierto por unas horas más.

Visualizé una gasolinera a unos minutos de distancia y decidí pasar a comprar comida y, de paso, llenar el tanque, aún tenía poco más de un tercio, pero de todas formas lo llené. Seguí mi camino luego de eso.

A las 4 de la mañana comencé a hablar conmigo mismo para distraerme del sueño que me invadía, fue una plática bastante interesante sobre mí mismo, y fue exitosa, pues soporté hasta las 6am. Cuando por fin amaneció, la luz me encandiló y volvió a quitarme el sueño, cosa que agradecí y detesté. Necesitaba dormir, pero no debía arriesgarme a ser blanco fácil de agentes enviados por la Agencia.

Hablando de la Agencia, no vi a nadie sospechoso de madrugada, y eso es bastante raro, ¿por qué no llamaron a nadie para venir por mí? Me intriga mucho.

En la carretera comenzaron a hacerse presentes más automóviles, pues ya eran casi las 7am. Seguí mi rumbo, vigilando que ninguno de esos caminos que hiciera batalla o algo así. Tenía sueño, pero debía seguir adelante.

Cada que me daba hambre tomaba alguna de las cosas del asiento de copiloto que había comprado en la madrugada, ni siquiera volteaba a ver qué agarra, sólo necesitaba comer algo, no importaba qué fuera. Así se pasó el día hasta las 5pm, cuando se acabó la comida y mi resistencia. Decidí estacionarme en el primer hotel que viera y dormir un rato, o sino, dormir aquí adentro, da igual. Por suerte, no muy lejos vi un pequeño lugar que parecia un hotel, no estaba mal por lo que me estacioné ahí y entré a la recepción.

-Hola, ¿en qué puedo ayudarle? -me dijo la recepcionista.

-Quiero quedarme un rato.

-Oh, por supuesto. ¿Cuánto se va a quedar, señor?

-Una noche, o menos.

-Está bien, su cuarto es el 11B en el segundo piso -luego me dio las llaves- Que tenga una buena estancia -Yo tomé las llaves, le agradecí y subí.

Cuando llegué al cuarto lo primero que hice fue tirarme en la cama. Me quite mis armas y las puse en la mesa de noche para estar más cómodo y dormí. Necesitaba energías para seguir conduciendo y/o enfrentarme a algún otro agente.

[CANCELADA] Killer Bean: De Camino a la AgenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora