Cielo oscuro, despejado, infinito.
El arenoso pitido,
Envuelto en inquietud,
Se hace más denso.Manecillas corriendo.
Se forma, lenta, lentamente
En altas hora de la noche.
Cuando el silencio reina, ecuánime.
Cuando cobarde titubea manefestando maldiciones.Y el pequeño sentimiento engorroso,
Se transforma en algo monstruoso.Y el chirriante sonidito
Cuál calor y frío."Ruidoso, pacífico, ambiguo."
Soledad ensordecedora.
Ya no estás en la cima,
Tu lado animal e creta sudor,
El miedo te corta la respiración.
Y cuando el instinto de no moverse,
Te altera la percepción.¡Bienvenido a mi medianoche!